Un grupo de aficionados de Albacete ha iniciado las gestiones para erigir una estatua al matador de toros retirado Dámaso González. La iniciativa, que fue presentada ayer a los medios de comunicación, pretende que el monumento se instale junto a la Plaza de Toros, frente a cuya puerta grande se levanta hace años el dedicado a Chicuelo II, que murió en accidente de aviación cuando se dirigía a México junto a su hermano Ricardo y el picador Garmendia. Se quiere que la obra escultórica tenga unas características que evidencien tanto la personalidad del torero como lo que significa para la afición albaceteña y de todo el universo taurino.
Es sabido que Dámaso ha sido un torero emblemático para Albacete y un ejemplo de entrega, temple y valor para toda la torería. Se quiere que el proyecto se haga realidad costeado por suscripción popular, para dar ocasión a todos los admiradores de Dámaso, que son legión, de participar en la creación en su ciudad natal de ese recuerdo perenne en bronce.