La España oficial sintió el puyazo galo y se puso a laborar o eso parece para que el ridículo fuese menos. El gobierno adelantó el proceso y quiere que la Fiesta sea declarada Bien de Interés Cultural en febrero. Antes de que sea demasiado tarde, si es que estamos aún a tiempo. Madrid declaró los toros Patrimonio Cultural Inmaterial. De la voluntad política del Ayuntamiento de Madrid respecto a los toros no había dudas. Ni con unos ni con otros. Todos recordamos el apoyo del profesor Tierno y otras corporaciones posteriores del mismo signo y cómo siempre de bien funcionó aquella Escuela, por eso todavía llama más la atención que ese reconocimiento último se haya aprobado con solo los votos del PP lo que vista la historia ya son ganas de enredar la madeja y encelarse con su propia sombra con tal de sacar o arañar, eso arañar, cualquier rédito.
Lea el artículo completo en su Revista APLAUSOS
