FESTIVIDAD DEL CORPUS

Aguado, a gran nivel, pierde el triunfo por la espada en Sevilla

Al sevillano, que cuaja una actuación notable por su actitud y da una dimensión ya de matador de toros, se le esfuman dos orejas tras fallar en la suerte suprema
Víctor García-Rayo
jueves 15 de junio de 2017

VÍDEO RESUMEN DEL FESTEJO

GALERÍA FOTOGRÁFICA DE GLEZ. ARJONA

PARTE MÉDICO DE PABLO AGUADO

Fotos: GLEZ. ARJONA

Tuvo calidad el primero de El Parralejo, con bondad el utrero al que para ser redondo le faltó un punto mayor de empuje. Pablo Aguado se fue a la puerta de chiqueros en una clara declaración de intenciones. Faena templada, elegante y presidida por la naturalidad del sevillano, que escuchó cómo le tocaban la música. Sensación de torero hecho y cuajado la de Aguado, que emborronó todo por el mal uso de los aceros. Además, en una de las veces que entró a matar se dio un porrazo en el ojo con la empuñadura de la espada, precisando atención en la enfermería.

El tercero, que se lidió como cuarto, se partió una mano y en su lugar salió un sobrero de la misma ganadería que no se lo puso nada fácil a Pablo Aguado puesto que no regaló las embestidas y exigió toques certeros y llevarlo bien. Eso hizo el sevillano en una faena llena de garra, entrega y hombría. Muy en novillero. Fue un toma y daca entre novillo y novillero, que no se amilanó en ningún momento pese a que resultó empalado en varias ocasiones aunque no herido ni prendido. Con el triunfo en la mano, pinchó en la suerte suprema y aunque había pañuelos suficientes, el palco no concedió el trofeo.

Pablo Aguado perdió de nuevo una oreja frente al sexto, el novillo que más y mejor se movió del encierro, si bien es cierto que cuando se sintió podido buscó las tablas. El sevillano toreó con elegancia, temple y variedad en otra faena en la que rayó a gran nivel y en la que mostró una notable actitud y hechuras de matador de toros. La espada, que no manejó con contundencia, le privó otra vez de tocar pelo cuando prácticamente lo tenía en la mano. La ovación no hizo justicia a la actuación del sevillano.

No sirvió el segundo, tardo, brusco y protestón. Pese a ello, antes protagonizó un buen tercio de varas, arrancándose de lejos, y ahí parece que se dejó todo. Tardeó mucho y protestó en exceso el de El Parralejo, que tuvo enfrente a un voluntarioso Rafa Serna, que no pudo ligar ni cuajar una faena con continuidad. Se corrió turno por el percance de Aguado, y en tercer lugar Serna lidió al segundo de su lote, otro utrero parado, sin empuje ni ímpetu y que apenas le embistió al espada sevillano. Sin opciones Serna, lo mató con solvencia. A portagayola se fue para recibir al último de su lote, un novillo que se dejó más por el pitón derecho y que pedía que se le llegara mucho. Se apagó el de El Parralejo, que tampoco duró mucho. Serna, de nuevo, se mostró muy voluntarioso y queriendo mucho, dentro de una labor correcta y pulcra rematada de una sensacional estocada que precisó de un golpe de descabello.

Sevilla, jueves 15 de junio de 2017. Novillos de El Parralejo (4º bis). Bien presentados, de parejas hechuras. De juego desigual, los mejores primer y sexto. Pablo Aguado, silencio tras aviso, vuelta al ruedo tras petición y ovación con saludos tras aviso; Rafa Serna, silencio, silencio y ovación con saludos tras aviso. Entrada: Algo más de media plaza. Saludaron en banderillas Juan Carlos de Alba y Antonio Ronquillo.

PARTE MÉDICO DE PABLO AGUADO: “Contusión y herida incisa en párpado superior. Movimientos oculares conservados. No se observa lesión corneal. Se recomienda revisión oftalmolófica. Pronóstico leve que no le impide continuar la lidia. Firmado: Dr. Octavio Mulet Zayas”.

Síguenos

ÚLTIMAS NOTICIAS

Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando