Las figuras del toreo miran para el otro lado del Atlántico. Vuelve la atracción americana, un nuevo mundo, un boyante y emergente mercado latino abanderado por una Colombia en plena oleada antitaurina pero respaldada por una afición fiel y un México que se ha reinventado a sí mismo y ve llenar sus plazas y competir a los toreros nacionales con los grandes de Europa. Un nuevo “Dorado” en pleno siglo XXI al amparo de unas economías competitivas y al alza, una pasión singular en los tendidos y un toro que permite a los toreros desarrollar su tauromaquia en plenitud.
– Alberto Elvira: “Colombia y México están viviendo un auge taurino desconocido desde hace más de veinte años”
– Santiago Tobón: “En Medellín llevamos cuatro años consecutivos de beneficios en nuestra feria cuando anteriormente todo eran números rojos”
– Roberto Domínguez: “Una figura del toreo concluía hace unos años la campaña europea con ochenta tardes, ahora con treinta. Eso es un factor clave, quieren torear más y tienen ganas”
– Del Olmo: “El patriotismo de los mexicanos de ver a los suyos compitiendo con los grandes ha revitalizado el ánimo de la afición”
– Una figura del toreo española puede cobrar por tarde entre 80.000 y 100.000 dólares de media en México y Colombia, un dinero impensable hace un tiempo