La noticia de la muerte de Chenel llegaba hace escasos días desde Colombia, país en el que Hermoso de Mendoza está llevando a cabo una triunfal temporada. Su muerte impactó en el mundo del toreo a caballo, puesto que no fue ocasionada por un golpe o una cornada, sino por un cólico. Una pérdida inesperada porque Chenel gozaba de muy buena salud y atravesaba por uno de los mejores momentos de su carrera. -Era un caballo que gustaba de grandes retos, disfrutaba ante el peligro y disponía de valor seco y sereno. Vibraba ante sensaciones fuertes y tenía gran espíritu de superación -Su excelente técnica, creatividad y entrega lo convirtieron en una suave y poderosa muleta; toreaba como sentía, con total sinceridad y máxima pureza
Lea AQUÍ el reportaje completo en su Revista APLAUSOS Nº 1945