Nadie dijo que iba a ser fácil. Con esta filosofía afronta Javier Martín el camino para ser matador de toros. Sensato y optimista a partes iguales, este madrileño es consciente de la realidad a la que se enfrenta. Desde que debutase en 2010 con los del castoreño, Javier Martín espera su oportunidad desde el banquillo de los sueños con la máxima de ser torero. Está dispuesto a conseguirlo cueste lo que cueste, se ha convertido en su obsesión. Es una cuestión de orgullo.
“Sé que el camino no es fácil pero el esfuerzo tiene recompensa y eso es lo que más me motiva”
Lea la entrevista completa en su revista APLAUSOS
Acceda a la versión completa del contenido
Cuestión de orgullo
El novillero sevillano, a unos días de su alternativa -será este sábado 25 de mayo-…
El torero de plata Luis Blázquez ha sido operado de nuevo de la grave cogida…
La Junta de Andalucía entregó los galardones en su primera edición en un acto presidido…
Jarocho se vendió caro y cotizó al alza en su presentación en Madrid. Su triunfo…
Jarocho se vendió caro y cotizó al alza en su presentación en Madrid. Su triunfo…
"Esa es la visión que quería que vieran de mí. Este es Ismael Martín". Son…