El primero de Garcigrande tuvo un buen viaje por el pitón izquierdo, aprovechándose Curro Díaz en bellas verónicas y superior media de remate. Nada destacable en los siguientes tercios, brindando la faena de muleta al público. Poderoso inicio saliéndose al tercio. Relajó la planta en la primera tanda sobre la diestra. Subió la intensidad en la segunda tanda también sobre el lado derecho con el compás abierto. Bordó el toreo al natural, corriendo la mano con suavidad y temple. Inconmensurable una trincherilla ligado con un cambio de mano a cámara lenta. Puso la plaza en pie en varios momentos, terminando en el centro del platillo toreando a placer por ambos lados. Mató de estocada en el rincón cayendo fulminado a sus pies. Curro Díaz está en un momento de madurez y magisterio muy importante que debería tener su justa recompensa en los contratos.
El cuarto fue de Román Sorando. El animal se frenaba al final de cada capotazo. Tomó una vara sin entrega. No parecía toro de triunfo, pero en el estado actual de éste torero todo es posible. Poderosos muletazos de inicio. Clavando las zapatillas en la arena, con la mano baja y ajustado le enjaretó varias tandas sobre la diestra que tuvieron importancia y profundidad. De igual guisa al natural, convenciendo a todos los presentes en la plaza. El final de faena fue pletórico, toreando a placer con la plaza puesta en pie, haciendo crujir los tendidos de piedra de una plaza más que centenaria. Para la historia la faena de Curro Díaz en la tarde de hoy. Se pidió el indulto, que el presidente no concedió, cobrando una estocada entera que tiró al toro de Sorando sin puntilla. Dos orejas y rabo ante el clamor del público.
El segundo, también de Garcigrande, tuvo nobleza y calidad. Rodilla en tierra le enjaretó buenas verónicas. Igualmente se lució en el posterior quite por chicuelinas. Se lucieron en banderillas Morenito de Arles y José Manuel Pérez Valcarce. Con la pierna flexionada se salió al centro del platillo. Centrado, el torero lo cuajó en las primeras tandas sobre el lado derecho, pero el trasteo fue a menos ante la poca clase de un animal que protestó en cada embestida. Mejoró al natural con muletazos largos y de mucho mérito. Mató de estocada caída.
Espoleado y a por todas salió Emilio de Justo con el quinto de Garcigrande. Verónicas de pie y de rodillas en un recibo de máxima intensidad. Brindó su faena de muleta a Curro Díaz, iniciando su labor de forma genuflexa formando un alboroto en los tendidos. Tiró la ayuda y toreo al natural con la derecha, toreando con largura, profundidad y mucha limpieza. Labor vibrante, creándose un clima de euforia en los tendidos. Al natural bajo la intensidad, subiendo de nuevo en el tramo final. Mató de pinchazo hondo perpendicular y descabello.
El tercero no tuvo una embestida clara en los primeros tercios. Nada destacable de Juan Ortega hasta que llegó la faena de muleta. Temple, suavidad y acariciando la embestida convenció al animal en un trasteo en la que destacó en las primeras series, ralentizando los muletazos, sacando grandes ovaciones del público. Mejor sobre la diestra, destacando también con torería y variedad en los remates de las series. Cobró una estocada entera y trasera.
A cámara lenta toreó a la verónica Juan Ortega al toro de Sorando que hizo sexto. Dos fuertes volteretas mermaron la fortaleza del noble animal. Inició su labor al hilo de las tablas con extrema suavidad y acompañando la embestida, intentando afianzar la noble y endeble embestida del animal de Román Sorando. Preciosos los cites a pies juntos, toreando sobre ambas manos despacio, de forma desmayada. Torería y belleza en una faena de almíbar. Mato de estocada entera.
Úbeda (Jaén). Sábado 30 de septiembre de 2023. Toros de Garcigrande y Román Sorando (4º y 6º). El primer toro, de Garcigrande, de nombre Almidonado, número 91, nacido en 03/19 y de pelo negro, fue premiado con la vuelta al ruedo. El cuarto toro, de Román Sorando, de nombre Engañoso, número 15, nacido en 09/18 y de pelo negro, fue premiado con la vuelta al ruedo. Curro Díaz, dos orejas y dos orejas y rabo; Emilio de Justo, oreja y oreja; y Juan Ortega, oreja y dos orejas. Entrada: Casi tres cuartos de entrada. Antes de romperse el paseíllo sonó el himno de España ante una atronadora ovación del público.
