El recorte del abono de Sevilla ha sido más epidérmico que visceral. Ha tocado la piel pero no ha llegado al tuétano. De manera que, cumplidas nueve fechas, la radiografía estaba clara: abono rentable. La fecha de lujo del Domingo de Resurrección -Morante, El Juli, Manzanares y la corrida de Garcigrande- se dio con lleno absoluto y probablemente tiró del abono más de lo que pueda presumirse. Ha quedado como frase lapidaria la declaración fiscal del empresario Ramón Valencia: con ese cartel y ese lleno se perdieron casi cien mil euros.
Lea la entrevista completa en su Revista APLAUSOS
Acceda a la versión completa del contenido
El mercado de Sevilla
Robleño, Cortés y Espada, multitudinario encuentro con la afición en Las Ventas
La empresa Espectáculos Marisma, comandada por Rafael Ayuso, ha cerrado los carteles de la Feria…
El novillero cordobés afincado en Guadalajara, Rafael Reyes, ha añadido a su equipo de apoderamiento…
Apenas un día después de su gesta en San Agustín de Guadalix, el espada conversa…
Según ha podido saber APLAUSOS, la empresa Tauroemoción ha ofrecido a los dos novilleros más…
Con motivo de la novillada que tendrá lugar en Valencia el sábado 11 de mayo…