“Cada vez es más complicado pensar que va a haber San Fermín. No está tomada ninguna decisión, pero soy consciente de que, conforme pasa el tiempo y los parámetros pandémicos se mantienen en estos valores, cada vez es más complicado”. Son palabras del alcalde de Pamplona, Enrique Maya, pronunciadas en la SER y recogidas por el portal Noticias de Navarra. El primer edil se ha pronunciado de nuevo en torno a la posibilidad -o imposibilidad- de que puedan celebrarse las fiestas pamplonesas una vez llegado el mes de julio.
Su opinión, según subraya el referido portal, coincide con la vertida por el vicepresidente del Gobierno de Navarra, Javier Remírez, quien también admite que “está muy complicado” que puedan celebrarse las fiestas. “Las cosas pintan hacia una situación muy compleja para los Sanfermines” pero todavía “no nos hemos marcado fecha” para comunicar la decisión de si podrán o no celebrarse, aunque “somos conscientes de que ese tiempo se va acortando”.
“Hay una programación de verano en la que se está trabajando y si finalmente pudiera haber una programación de San Fermín se encajaría”, ha afirmado el alcalde, que ha lanzado un mensaje esperanzador: “Que los ciudadanos estén tranquilos porque va a haber actividades en la ciudad” y “luego veremos si tenemos la fortuna de poder encajar ahí algo de Sanfermines”.
¿HABRÁ TOROS?
Sobre la posibilidad de que se celebren en Pamplona festejos taurinos este año, Enrique Maya ha comentado: “Todos somos conscientes de que puede haber más posibilidades de hacer algo en un recinto controlado, como es una plaza de toros”, si bien “mucho más difícil es controlar los encierros en la calle”, añadiendo: “Si es posible que haya corridas de toros en otras ciudades, en las mismas condiciones podría haberlas en Pamplona”, reconociendo, eso sí, un problema en la plaza navarra: “Si ya están vendidos los abonos, ¿cómo reorganizas todo para esos días?”, dado que no se permite un aforo total por la normativa anticovid. No obstante, ha reiterado que “no descarto esa posibilidad” de que haya festejos taurinos. El tiempo y la pandemia, pues, tendrán la última palabra.
