Los diestros Iván Fandiño y David Mora, la ganadería de Alcurrucén, el polifacético André Viard y el fotógrafo de APLAUSOS Javier Arroyo, han sido los galardonados en la sexta edición de los trofeos del Club Allard de Madrid, entregados ayer en Madrid por el titular de los trofeos, Enrique Ponce.
“Estoy especialmente contento de entregar el trofeo al torero revelación del año a Iván y a David. Otras temporadas este galardón había recaído en toreros más consolidados pero en esta ocasión reconoce y recompensa el sacrificio, la entrega y el afán de superación de dos toreros que llegan desde abajo”, señaló Enrique Ponce en su intervención. A los dos premiados les envió un doble mensaje: “Ahora os está tocando matar corridas duras como en su día me tocó a mí. No os importe. Os darán una base de cara al futuro de la que os sentiréis orgullosos cuando pase el tiempo. Y no olvidéis que en el toreo la recompensa tarda en llegar pero llega”.
Sobre la ganadería de Alcurrucén, el diestro valenciano afirmó: “Tengo gran admiración por la familia Lozano por la persecución que tienen en la conservación del tipo del encaste ‘núñez’. La máxima calidad de este encaste está en sus manos”.
Tras recoger sus galardones, Iván Fandiño y David Mora agradecieron la concesión de los trofeos. “Espero que todo lo que hemos conseguido no quede aquí y que la carrera de David y la mía, juntos o por separado, siga creciendo”, manifestó el diestro vizcaíno, mientras que el madrileño subrayó: “La clave del triunfo está en continuar con la misma humildad que hemos demostrado hasta ahora”.
El catedrático y escritor Andrés Amorós fue el encargado de glosar a los dos toreros premiados. Recordó la temporada que han cuajado y les auguró un brillante futuro. “En ellos se refleja una de las frases más célebres de Marcial Lalanda: mientras exista un toro auténtico y un torero clásico, la tauromaquia es lo más hermoso y no morirá nunca”, expuso.
José Luis Lozano recogió el galardón destinado a la ganadería. “En los toros hemos hecho de todo. Somos apoderados, empresarios, quisimos ser toreros, sin embargo, lo más romántico de todo es ser ganadero. Es lo más difícil de todo pero lo más gratificante”.
Por su parte, nuestro compañero Javier Arroyo abrió el turno de agradecimientos. En sus palabras quiso tener un recuerdo: “Para todas las personas que han confiado en mí. Es un orgullo transportar por mi trabajo el mensaje auténtico de la tauromaquia”. A continuación, André Viard recogió el premio a la mejor labor informativa. “Mi trabajo trata de mostrar los valores y la autenticidad de la Fiesta, ese el objetivo de Tierras Taurinas”, reconoció el francés.