Manuel Escribano ha sido el último matador de toros invitado para promocionar las Corridas Generales de Bilbao. Lo hizo, como sus anteriores compañeros, Ginés Marín y Paco Ureña, atendiendo a los principales medios de comunicación vizcaínos.
Escribano realizó una ruta por algunos de los lugares más emblemáticos de la ciudad. La ruta le llevó a la Alhóndiga, el centro de ocio y cultura de referencia en la ciudad, y también discurrió por algunas de las calles más céntricas de la capital, un recorrido que el diestro de Gerena acostumbra a hacer en bicicleta cada vez que torea en Bilbao. El emblemático Hotel Ercilla también tuvo protagonismo en el recorrido.
El torero sevillano comentó que “para mí Bilbao, a parte de una ciudad bestial, es una de las ferias donde más disfruto, desde el primer año que vine en 2013”. Fue con una corrida de La Quinta y paseó un trofeo, este año está anunciado en un cartel de relumbrón, junto a Morante y Roca Rey ante toros de Puerto de San Lorenzo. “Este año es el cartel que busco y llevo buscando mucho tiempo, quiero dar mi versión en este tipo de carteles. Para mí es un compromiso y una responsabilidad, cuando tú pides y reivindicas tanto algo, tienes que estar a la altura de eso que pides, puede ser una de las tardes más importantes de mi vida”, comenta con total sinceridad.
Además, el torero se convirtió en el invitado de honor de la última clase práctica clasificatoria que tuvo lugar el viernes pasado en el coso de Vista Alegre y en la que se lidiaron erales de Puerto de San Lorenzo. El diestro, que está anunciado con el hierro salmantino la tarde del 24 de agosto, protagonizó el coloquio posterior al apartado de los erales de la clase práctica junto con el ganadero José Juan Fraile. Juntos presentaron a los toros reseñados para la quinta del abono bilbaíno.