El primero de la tarde se salió suelto del capote que le ofreció Cayetano. El de Algarra tuvo gran nobleza aunque anduvo muy justo de fuerza. Inició Cayetano su faena de rodillas con gran decisión. Aprovechó la noble embestida de su oponente para firmar dos series muy templadas por el pitón derecho. A partir de ahí al animal le costó seguir los engaños y comenzó a defenderse. Tiró de oficio Cayetano antes de cobrar una gran estocada.
El cuarto, un castaño de bonitas hechuras, tuvo calidad pero estuvo falto de fondo. Cayetano inició su faena rodillas en tierra con ayudados por alto, aprovechando las primeras embestidas del de Luis Algarra, mostrándose nuevamente muy templado. Por el pitón izquierdo dibujó varios naturales templados y de largo trazo. El animal se fue viniendo a menos y Cayetano, en un arrebato de disposición y ganas, echó rodillas en tierra para torear en redondo, imprimiendo intensidad a la faena y poniendo la emoción que le faltaba a su oponente. Mató de gran estocada de efecto fulminante, cortando una oreja que le abría la puerta grande.
Daniel Luque toreó de capote muy templado en su recibo al segundo de la tarde y, posteriormente, se lució en un quite por tafalleras. Desde que saltó al ruedo el de Algarra dio muestras de tener tanta calidad como falta de fuerza. Daniel Luque, que brindó su faena a Rafaelillo, inició su labor con unos torerísimos y templados ayudados por alto. El sevillano hizo todo a favor del toro para intentar afianzarle. Todo lo hizo con exquisito temple y una bonita composición estética pero el de Algarra no aguantó. Acortó entonces las distancias pegándose un arrimón. Mató de estocada paseando un trofeo.
El burraco que hizo quinto empujó con clase en el caballo. El de Algarra fue un toro noblote que tuvo buen embroque pero salía de los muletazos con la cara a media altura y sin excesivo celo. Luque volvió a mostrarse muy firme en una primera parte de faena en la que, de uno en uno, tuvo mayor relieve el toreo sobre la zurda. Subió el tono de la faena cuando Luque acortó distancias dejándose acariciar la banda de la taleguilla por los pitomes del astado. Esta superioridad en la corta distancia y unas luquesinas pusieron al público en pie. Media estocada. Oreja con fuerte petición de la segunda, dos vueltas al ruedo y bronca al palco.
Jorge Martínez brilló con el capote ante el tercero de la tarde, en su recibo a la verónica y en un posterior quite por chicuelinas. Se lució Antonio Chacón en dos soberbios pares de banderillas. El de Algarra tuvo cierta bondad pero anduvo muy escaso de fondo y raza. Inició el de Totana su faena de rodillas con tremenda entrega. Anduvo Martínez muy firme y asentado, y acertó con las distancias y los tiempos en una faena en la que anduvo muy por encima del de Algarra. Acabó acortando las distancias con gran seguridad pero se atascó con los aceros y se esfumó el premio.
Jorge Martínez se estrelló con el manso sexto. El de Algarra marcó su condición ya en los primeros tercios de la lidia. El murciano hizo un esfuerzo en una faena de mucha firmeza, entrega sincera y valor seco, aunque de imposible brillo por la condición del de Algarra.
Murcia. Domingo, 15 de septiembre de 2024. Toros de Luis Algarra. Desiguales de hechuras, manejables aunque de escaso fondo y raza en líneas generales. Cayetano, oreja y oreja; Daniel Luque, oreja y oreja con fuerte petición de la segunda y dos vueltas al ruedo; y Jorge Martínez, palmas y ovación. Entrada: Un tercio. Tras el paseíllo se entregó a los toreros y ganadero, un obsequio con motivo de la Corrida de la Prensa. Saludaron tras parear al tercero, Antonio Chacón y José Magaña.