Cuajó Luque una de las mejores obras de su carrera en su gesta en solitario con los santacolomas de La Quinta en Nimes. Beduino y Luque, tándem perfecto. Hasta cogió las banderillas el sevillano, que A pies juntos lo recibió de manera soberbia luciéndolo en los tres tercios, en la larga distancia en la suerte de varas y banderilleando con brillantez.
Lo cuajó de principio a fin en una faena templada por ambas manos que remató con sus clásicas luquecinas desatando la locura en el Coliseo. Tras una gran estocada, fue premiado con las dos orejas y el toro, Beduino, Nº 80, de 481 kgs, con la vuelta al ruedo en el arrastre. Como dirían en Nimes: Oh lá lá!
