Morenito de Aranda es uno de los integrantes del cartel del próximo sábado 8 de julio en Teruel, donde junto a Enrique Ponce y Curro Díaz honrará toreando a Víctor Barrio un año después de la fatídica tarde en la que perdió la vida el torero de Grajera.
Morenito es uno de los hombres a los que le tocó vivir en primera persona la tragedia del compañero y amigo. Un año después, el burgalés volverá a enfundarse el vestido de luces para estar en el mismo escenario poniendo así su granito de arena para homenajear la eterna figura de Barrio. “Es un día muy importante para homenajear a un amigo. Intentaré que, desde donde esté, Víctor se sienta orgulloso”, asegura Morenito, para quien la tarde es muy bonita vista como torero: “La corrida de Teruel me hace una ilusión tremenda por compartir cartel con Enrique y con Curro, que son dos toreros importantísimos. Fíjate torear con el maestro Enrique, es un gustazo…”, afirma el torero burgalés en el reportaje que, a modo de previa, publica esta semana la edición en papel de APLAUSOS.
El diestro llega a la cita tras haber triunfado en Burgos en la lidia de seis toros de Adolfo Martín y, anteriormente, haber tocado pelo en San Isidro. La moral está alta: “Los toreros en estas tardes tan importantes buscamos el triunfo pero, sobre todo, las sensaciones que te queden por dentro y que te hagan avanzar, y ésas han sido buenas”, afirma quien lleva cortadas nueve orejas en Las Ventas: “No es mal número; con lo difícil que es triunfar en Madrid no lo es, desde luego”, insiste.
Morenito pasó también recientemente por los micrófonos de “Aquí, el toreo”, donde afirmó sentirse en paz consigo mismo tras haber habido tiempos en los que anduvo en guerra con el famoso “sistema” del toreo: “Ha habido momentos en mi carrera en los que sí me he sentido un poco contrariado en ese aspecto, pero ya no ando pendiente de esas cosas. Ahora sólo busco sentirme bien delante del toro, busco un entendimiento conmigo mismo delante de él e intentar ocupar en la profesión el lugar que quiero ocupar. El tiempo ya se encargará de decir el resto”, explica, y añade: “Cuando un día muy lejano, si Dios quiere, ponga fin a mi trayectoria como torero, se valorará si he sido o no bien tratado por el sistema, pero ahora eso no ocupa mi mente”.
De momento, Morenito busca seguir creciendo: “Hay cartas para jugarlas bien y ganar las partidas”, advierte. La primera de ellas, de momento, el próximo 8 de julio en Teruel. Tras los seis adolfos de Burgos, le esperan otros dos en la Feria del Ángel. Ocho albaserradas en pocos días: “Mucho cárdeno -ríe-… pero bueno, ya el año pasado tuve la oportunidad de torear varias corridas de Adolfo y hubo momentos importantes. Ojalá en Teruel pueda obtener un triunfo rotundo, en memoria además de un compañero y un amigo: Víctor Barrio”.
