Oreja para Manzanares y entrega sin toros de Castella.
GALERÍA FOTOGRÁFICA DE JAVIER ARROYO
Fotos: JAVIER ARROYO
Abrió plaza un toro bien hecho y rematado, aunque agradable por delante, de Cuvillo, que tuvo calidad y dulzura pero muy poca fuerza. Templada la labor de Enrique Ponce, que cuidó al toro con mimo toreándolo con suavidad sobre ambos pitones. Mató de una muy buena estocada arriba. Oreja y ovación para el toro en el arrastre.
Se estrelló Castella con un toro de muy pocas opciones, que fue manso en los primeros tercios y que desarrolló complicaciones en la muleta, con una embestida áspera y tosca, siempre con la cara a media altura y defendiéndose. Poco pudo hacer el francés, que estuvo dispuesto. Mató de estocada al segundo intento. Silencio.
Un ramillete de buenas verónicas le recetó Manzanares al tercero, un toro que embistió con nobleza y humillación, a veces con despaciosidad. Bueno el toro. Manzanares dejó algún momento en el que toreó con gusto pero sin acabar de levantar el vuelo de una faena en la que le dio distancia y tiempo al de Cuvillo. Lo mejor, una gran estocada fulminante. Oreja.
Enrique Ponce sacó todo sus recursos para meter en el canasto al cuarto de la tarde, que fue protestado tras unos primeros tercios en los que salía suelto y desentendido. Pero sacó movilidad en la muleta, aunque embistió a media altura y sin mucha clase. El valenciano supo tapar muy bien los defectos del animal y con una muleta poderosa supo sacarle partido al cuvillo, en una faena en la que puso hasta la nota bullidora con varios afarolados y hasta un molinete de rodillas. Mató de una estocada algo delantera y pelín caída. Oreja con petición de la segunda.
Tampoco tuvo suerte Castella con su segundo, un toro aplomado y sin fondo con el que tuvo que tirar de arrimón para calentar el ambiente. Destacar el comienzo de faena por la espalda en los medios y un buen tercio de banderillas de José Chacón, que fue obligado a saludar.
Fue el último un toro de escaso fondo y sin emoción que impidió que la faena de Manzanares llegase a los tendidos. Lo intentó el alicantino pero su obra nunca acabó de tomar vuelo. Mató de media tendida.
Castellón. Feria de la Magdalena. 4º de abono. Viernes, 4 de marzo de 2016. Toros de Núñez del Cuvillo, rematados, cómodos, nobles aunque de escaso fondo; corrida pareja. Enrique Ponce, oreja y oreja tras aviso; Sebastián Castella, silencio y ovación con saludos; Manzanares, oreja y silencio. Entrada: Más de tres cuartos.
