Nunca se habían encabalgado tanto las ferias de Abril y San Isidro. El domingo 8 de mayo se jugó en Sevilla la corrida de Miura, y con ella cayó como suele el telón de la feria pero no del abono. Sólo dos tardes después se alzó la cortina de abono y feria en las Ventas. Una de Valdefresno variada y amplia, bien puesta. Los dos últimos toros de Miura jugados en Sevilla fueron de los de entrar en los anales. El sexto, por volver vivo a corrales tras el castigo de los tres avisos.
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