Categorías: Opinión

Primavera en Otoño

Eugenio de Mora, cuya madurez supera en gusto a sus años triunfales, o Curro Díaz, que al fin ha puesto en valor su arte y su torería, son parte de un grupo de profesionales que no quieren vivir en la orilla sin mojarse en el río de las ferias. Pero hay muchos más…

El año taurino se ha convertido en una primavera exultante. A más de las figuras, la mayoría están ahí porque se lo han ganado, a más del batallón joven liderado por López Simón y ese temblor histórico que produce Roca Rey, hay un despertar imponente de la clase media con argumentos para subir a la Primera División. Y se van a poner caros los puestos porque hemos pasado de la escasez a la mejor cosecha de muchos años. Y al despertar de toreros que parecían hibernar como el lirón, la marmota, el oso polar, o el koala supone que la cola de los que piden sitio y curro es cada vez mayor y con mejores argumentos. Incluso en el árido Madrid del verano. Los Eugenio de Mora, cuya madurez supera en gusto a sus años triunfales, los Curro Díaz, que al fin ha puesto en valor su arte y su torería, son parte de un grupo de profesionales que no quieren vivir en la orilla sin mojarse en el río de las ferias.

UN MANOJO DE NOMBRES EN UN VERANO MÁS QUE INTERESANTE

Ese Fortes, ahora sí que da gusto, ahora sí que ha encontrado el camino no de las espinas diarias, sino del temple, el gusto y el valor al servicio del toreo sin prisas ni tirones. El suave oleaje del temple. Y ese debe ser su camino. Ya cobró bastante y ha rebosado el cupo del dolor. Ahora, si lo de Málaga se repite, el hijo de Mary Fortes hay que colocarlo en el apartado de los artistas buenos. Y ese Javier Jiménez que con cuatro contratos se ha puesto a gritar su categoría. Ese tío tiene lo que tienen los que pueden funcionar. Sevilla, la heroica en Pamplona, con dos narices y encima herido y noqueado siguió en la brecha. Y tiene una mano izquierda nada común. Y por si faltaba algo, de oca en oca y tiro porque me toca. A hombros en Madrid, en el ardiente verano, que van cuatro (es un decir), los más aficionados, pero también los menos eufóricos. Pues puerta grande. Ese pide paso y sí puede y debe estar en el póker que lideran LS y RR.

Y ese Cayetano que va y viene, que parece que no y sin embargo es el más Paquirri de todos. Ojo que no sólo es guapo, dicen, porque tiene muchas cosas del corazón torero de su padre. Y va a más y a mejor. Grata sorpresa. Y si quieres una familia ejemplar y torera quédate con los Adame, con Joselito, el cuajado, con Luis David (este puede estar a partir del doctorado) en el puesto de mando del 2017 y ojo a Alejandro el más pequeño. Es el artista de una familia que se retroalimenta del trío familiar y torero.

Y en este panorama del despertar de la clase media ha vuelto El Cid. No como un fantasma del pasado, que yo lo he visto. Ha vuelto con el secreto, que tienen muy pocos, de entender como nadie victorinos, adolfos y demás reata a la que hay que torear con el valor de la ausencia de toques y la caricia del temple.

Y ese Ureña que el día que cuaje un toro bueno vamos a ver qué pasa. Y ese Román que parecía de coñá, y medio chiflado, es ahora un pedazo de tío y de torero. Ése se abre paso entre los muros. Qué cambio. Y tantos… David Mora al que nunca agradeceremos su ejemplo. Hasta ese Robleño que en Gijón se pegó una jartá de torear a gusto con la gran corrida de La Quinta. Grandes ganaderos.

Sólo Ponce tiene el divino don de la longevidad ascendente. Habrá que clonarlo para asegurar el futuro. Y me he dejado figuras y toreros que funcionan al margen para que se note que estamos en el mejor momento torerista. Más y más plural.

Lo que no estamos es, ni remotamente, en el mejor momento ganadero. Y no puede ser que media docena de ganaderías, en las que hay de todo como en botica y encima se igualen por el mismo encaste aunque cada ganadero le ponga una pizca de su gusto personal, se repitan todos los días, en todas las ferias, en todas las tardes de figuras, etc. No se dan cuanta que no salir del más de lo mismo es enflaquecer el futuro y la variedad. Por ahí se nos va parte de la riqueza de este espectáculo.

Y una pregunta que nadie se hace: ¿qué fue de Juan Leal? Aquel torero galo que en San Isidro se pegó un arrimón, brutal y torero, a un toraco que pudo arrancarle la cabeza. Ni un pitón. Así de jodido es esto. O de grande si miras el ejemplo de Cristina Sánchez. Torero de verdad. La mujer más importante de la Tauromaquia que ha vuelto a ser un ejemplo. Y ha hecho un favor a todos. A los hijos, a su apoyo a la lucha del cáncer infantil, a la Fiesta, a la buena imagen, al respeto.

Consulte AQUÍ los contenidos de su Revista APLAUSOS Nº 2031

Consulte AQUÍ los contenidos de su Revista APLAUSOS Nº 2031 para iPad

Consulte AQUÍ los contenidos de su Revista APLAUSOS Nº 2031 para Android

Acceda a la versión completa del contenido

Primavera en Otoño

Manolo Molés

Entradas recientes

El colorido del 15 de mayo en Las Ventas

Samantha Vallejo Nájera y su hermano Colate, Pepe Hidalgo y López Simón, Pepín Liria, Carlos…

4 mins hace

Solo Perera en un Día del Patrón de poco contenido (Vídeo)

La espada le impidió a Perera pasear una oreja del cuarto, en un Día del…

30 mins hace

El Día de San Isidro, en imágenes

Perera hizo lo más destacado en tarde de poco contenido el día del Patrón. Ureña…

36 mins hace

Perera: “La espada hoy no ha funcionado, desgraciadamente”

Miguel Ángel Perera estuvo muy cerca de cortarle una oreja al cuarto de El Parralejo…

1 hora hace

Jesús Moreno, baja en Valdilecha

El novillero Jesús Moreno no podrá llegar a tiempo para hacer el paseíllo el próximo…

3 horas hace

El Ayuntamiento de Madrid concede a la Fundación Toro de Lidia la Medalla de Madrid

La entrega se ha realizado esta mañana en el Palacio de Cibeles coincidiendo con la…

4 horas hace