Sirviéndose de la mascletá de aquella mañana del Día de San José en Fallas, Rui Fernandes ha regresado a plazas y ferias que no hace tanto le pusieron en órbita. Sevilla le vio con una escueta materia prima y en San Isidro volvió a sentir el calor de Las Ventas. Figura y referente en su país, su intención en 2011 es provocar el estruendo de una gran detonación para hacerse imprescindible.
“El comienzo de temporada en Valencia fue muy bonito. Fue una manera de demostrar a la gente que
yo estaba allí de nuevo”
“Ahora mismo tengo la suerte de contar con una baraja de caballos que me hacen ser muy optimista”
Lea la entrevista completa en su revista APLAUSOS