POR CRISTIAN ZAMARRÓN
Este sábado 14 de septiembre Albacete se vestirá de gala para acudir al doctorado en tauromaquia de un joven novillero que tiene todas las ilusiones puestas en el día de su alternativa. Samuel Navalón desea ser figura del toreo y se acartela en el día más importante de su trayectoria hasta el momento con José María Manzanares como padrino y Roca Rey como testigo. El de Ayora, con raíces albaceteñas, que reapareció triunfalmente en su despedida como novillero en Albacete tras la grave cornada de El Casar, cree que la profesión de matador de toros es lo más grande que existe y carga consigo a sus espaldas una mochila llena de valor, disposición, compromiso y fe. Conversamos con el futuro matador de toros en la antesala de su doctorado.
-Reapareció en una despedida por todo lo alto como novillero en Albacete. ¿Qué sensaciones tuvo al reaparecer y al torear su última novillada antes de la alternativa?
-Para mí se trató de un día muy importante puesto que venía de recibir una cornada unos días antes en El Casar. Fue un día de superación. Se trató además de un día muy significativo puesto que, como bien has dicho, era mi última novillada antes de mi alternativa.
-Háblenos de aquella tarde, cortó tres orejas y caminó a hombros hacia la alternativa ¿Qué recuerda de las dos faenas de aquel día?
-Ambas fueron muy bonitas. Viví una tarde muy especial en términos generales. Recibí el cariño de la afición de Albacete desde que pisé los alrededores de la plaza. Quise dar el máximo en ambas faenas a pesar de no estar al 100%. Deseaba saborear cada momento. Por suerte, los dos novillos de mi lote me ofrecieron opciones para poder triunfar. Me entregué con los dos toros y la afición se volcó conmigo. Se trata de una tarde que recuerdo con mucho cariño y que se que nunca va a volver. La guardaré para siempre en mi memoria.
-Perdió El Álamo, Villaseca y Calasparra. ¿Fue un esfuerzo llegar a tiempo a esa despedida como novillero?
-Sí. Sinceramente me dio mucha pena no poder cumplir con los compromisos de El Álamo, Villaseca y Calasparra ya que se trataba de novilladas en las que tenía mucha ilusión puesta. Siendo positivo, pienso en que finalmente he podido cumplir con mi primer compromiso con Albacete y podré cumplir también con el segundo. Ha sido un esfuerzo muy grande porque la cornada todavía sigue fresca y los puntos aun están ahí. Lo bueno es que la herida va mejorando poco a poco día tras día. Lógicamente, es un proceso y no evoluciona todo lo rápido que a mí me gustaría pero, he de decir, que este esfuerzo merece la pena si la recompensa es saborear todo lo que se puede vivir en el ruedo de una plaza de toros.
Extraordinario natural de Samuel Navalón. Foto: Arjona
-Un día antes, ¿qué se le pasa por la cabeza en la antesala de su alternativa?
-Ilusión. La ilusión de poder cumplir el sueño de mi vida, de poder convertirme en matador de toros. Evidentemente también responsabilidad y compromiso total con la plaza de toros de Albacete y con su afición. Espero entregarme al máximo y, sobre todo, poder disfrutar del día más importante y más bonito de mi vida y de mi carrera hasta el momento.
-El cartel de su alternativa se trata de un cartel soñado junto a las figuras. ¿Qué siente?
-Me siento plenamente afortunado de poder formar parte de ese cartel que ni en mis mejores sueños hubiese imaginado. Poder compartir cartel con el maestro José María Manzanares y con el maestro Andrés Roca Rey para mí es un un sueño. Sobre todo me hace sentir un privilegiado. Espero que no solamente sea esta vez ya que me gustaría compartir cartel con ellos en más ocasiones.
-¿Cuánto impone trenzar el paseíllo con ellas?
-Esa respuesta te la daré cuando termine la tarde. De momento la sensación es de responsabilidad pero también de ilusión por poder compartir cartel junto a ellos. La sensación de mirar a mi izquierda y a mi derecha durante el paseíllo estoy seguro de que no la olvidaré nunca.
Samuel Navalón recibe a porta gayola. Foto: Arjona
-¿Qué pesa más la responsabilidad o la ilusión de doctorarse en Albacete?, que es también su casa.
-Ambas cosas. 50/50. La tarde de mi alternativa reúne ambas sensaciones. La ilusión es la que lo mueve todo. La fe y la esperanza por ser torero es lo que me ha hecho seguir adelante siempre, ante cualquier adversidad. La responsabilidad ya que la tarde de mi alternativa es, como he mencionado antes, la más importante de mi vida y de mi carrera hasta el momento y estoy obligado a dar lo mejor de mi mismo.
-¿Es diferente la preparación al tratarse de la alternativa? ¿Hace hincapié en algún aspecto en especial?
-La verdad es que mi preparación ha sido igual que siempre aunque, lógicamente, estas semanas previas a la alternativa ha cambiado todo debido a la cornada que me ha obligado a no poder entrenar con la misma intensidad con la que lo venía haciendo. Me he tenido que adaptar y acoplarme a los movimientos que puedo hacer y a la intensidad que tengo que aplicar. La preparación física es diferente pero la mental es la misma. Es fundamental trabajar el pensamiento y la concentración.
-¿Qué balance hace de su etapa como novillero?
-Para mí ha sido maravillosa. He tenido el lujo de torear en plazas que siempre había soñado y he conseguido cumplir metas que previamente me había propuesto. Me he sentido muy feliz. He disfrutado de esta etapa de mi vida aunque ya queda atrás. Ahora comienza una etapa nueva a sabiendas de que va a ser aún mucho más difícil, pero, a su vez, estoy plenamente convencido que también va a ser mucho más bonita.
La media verónica de Samuel Navalón. Foto: Roland Costedoat
-El próximo sábado 28 de septiembre se encuentra acartelado en Madrid, en la tarde de la despedida de Enrique Ponce de la plaza de toros de Las Ventas, junto a David Galván. Tras el impacto de San Isidro, ¿cómo se imagina ese regreso al coso de la calle de Alcalá en un cartel tan importante?
-Estoy deseando. Ansío el regreso a la plaza de toros de Madrid y más aun si cabe en ese cartel tan importante, en la despedida del maestro Enrique Ponce que ha sido una figura máxima y un torero que ha marcado época. Su despedida, al igual que toda su carrera, será historia del toreo. Me hace una ilusión tremenda poder formar parte de ese cartel. Espero estar a la altura de una tarde de tantos quilates.
-Y después de la alternativa ¿qué?
-Después de la alternativa viene la confirmación en la plaza de toros más importante del mundo, antes viene también una corrida en la localidad de Munera el domingo 22 de septiembre y más tarde viene una corrida en Las Rozas el domingo 6 de octubre. Después de la alternativa va continuar estando ahí la máxima ilusión y toda la fe puesta en seguir creciendo y evolucionando como torero que para mí es lo más grande que existe.
-¿Le da miedo pensar en lo que ocurrirá posteriormente?
-No, miedo no. Me genera una sensación que siendo sincero no te sé definir. No creo que sea miedo. Es una sensación que quizás en parte me hace sentir feliz ya que estoy viviendo y voy a poder vivir lo que para mí ha sido, es y será mi sueño. Me siento un afortunado y me siento también en la obligación de aprovechar al máximo todo lo que estoy viviendo y sintiendo ya que quizás sean momentos que nunca vuelvan.
