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Todos con Estrella Morente

Estrella Morente ha dado educada, respetuosa y culta, también pausada respuesta, a la muchacha que en Operación Triunfo calificó sin el mínimo pudor de nazis y sicópatas a los aficionados a los toros, además de proclamar inexactitudes como que el toreo vive poco menos que de las arcas del Estado. Se lo ha dicho a compás, con música. Naturalmente las hordas anti se han levantado en armas y descalificaciones varias contra Estrella en una demostración más del sectarismo desmadrado e inculto en el que viven instalados. Que se insulte grotescamente desde aquel lado de la trinchera en la que tan a gusto se sienten, que disparen falacias como balas desde esa trinchera que han abierto ellos, les parece justo y normal, que les respondan desde la educación les parece abusivo e impropio. No sé si la sociedad acabará dándose cuenta de las aberraciones a las que llegan semejantes posturas y habrá la justa reacción, pero bastaría leer a las dos o ver los dos vídeos para darnos cuenta de quién es quién.

La muchacha, me ahorro la promoción que supone nombrarla, dijo textualmente ante las cámaras de la tele de todos los españoles “Ostras, hay que ser muy psicópata. Es muy nazi, mucho”. Se refiere a quienes nos gustan los toros. “Y encima -añade- te vienen y te dicen que los toros dan mucho dinero. No me sé las cifras, porque no me las sé, pero si haces la comparación de lo que me cuesta a mí la tauromaquia limpiando mierda para poder mantenerme en mi vida… Me quitan dinero y lo meten en la puñetera tauromaquia. Porque cogen dinero de los impuestos. Y si comparas el dinero que genera con el que nos cuesta nos sale fatal”.

Estrella le contestó cuando coincidieron, lo hizo cantando, con arte, con entereza, con delicadeza, con unos versos de Bergamín que por cierto no son ni invento ni improvisación: “Ni el torero mata al toro, ni el torero mata al toro, ni el toro mata al torero, los dos se juegan su vida a un mismo azaroso juego. No trafiquéis con su alma, no trafiquéis con su alma, no le perdonéis la vida al toro bravo en la plaza, que es una ‘mala cobardía’ robarle al toro su muerte, a solas y en su agonía…”. ¿Habrán leído ellos a Bergamín?, ¿sabrán siquiera quién fue Bergamín?

De forma patética, propia de los años más negros de la oprobiosa, la cuenta de fans del programa ha censurado la intervención de Estrella en la parte que defendía los toros. No hicieron lo mismo en las declaraciones de la muchacha. Lamentable y casposo.

Grande Estrella. Ejemplar Estrella. Mi respaldo, mi solidaridad y reconocimiento con quien no ha tenido empacho ni temor a defender nuestra cultura y nuestra verdad. Harto de los melifluos que se tapan por temor a las consecuencias de defender lo nuestro, aún me parece más grande.

Estos son los dos vídeos, vea, escuche y compare la calidad personal y cultural de las partes.