Borja Jiménez se enfrentó a un encastado ejemplar con el que el sevillano se entregó en un toreo de garra y estética, mejor al natural, muy mal rematado con la espada de una media estocada muy baja. Ello no impidió que se le concedieran las dos orejas. El sexto embistió encastado, y encastado estuvo también Borja Jiménez, cuyas ansias de triunfo le llevaron a manejar las telas con escasas sutilezas. Mató mal, pero no importó, paseando otras dos orejas y saliendo en solitario a hombros.
El sublime recibo a la verónica de Juan Ortega, seguido de un quite por ceñidas y gustosas chicuelinas, puso el ambiente a favor para la faena de muleta, que tuvo momentos de toreo al ralentí, sobre todo al natural, exquisito. Sin embargo a punto estuvo de escuchar los tres avisos al pinchar repetidas veces. Al final fueron dos, y ovación con saludos.
Y en el quinto volvimos a ver torear. De capote y de muleta, con ese empaque que derramó por la plaza de Almodóvar del Campo, Juan Ortega. Hubo lances mecidos, naturales deletreados y saboreados (daba tiempo a ambas cosas) y toreó por derechazos despatarrado y, a la vez, embraguetado. Sin un solo aspaviento. Con la plaza entregada, como había sido su toreo, se tiró a matar, arriba, y volvió a pinchar como en el segundo, aunque no tanto. Fue a la tercera cuando lo tumbó, y a sus manos fue una oreja. Que, en realidad, fue lo de menos. Lo de más fue el toreo. Para elegidos.
El primero tuvo tanta nobleza como falta de chispa, y un torero como Daniel Luque, en este momento, anduvo fácil, sin despeinarse, logrando lo más lucido al natural, sobre todo en los remates, raramente en pases de pecho. Mató pronto y bien a la primera y paseó la primera oreja de la tarde. No ayudó el tardo cuarto, al que le faltó vida y con el que Luque lo intentó sin brillo posible. Ovación con saludos.
Almodóvar del Campo (Ciudad Real). Viernes, 20 de septiembre de 2024. Feria de Septiembre. Toros de Loreto Charro, de correcta presentación y juego variado. Mejores, segundo, tercero y quinto. Daniel Luque, oreja y ovación con saludos; Juan Ortega, ovación con saludos tras dos avisos y oreja; y Borja Jiménez, que sustituía a Morante de la Puebla, dos orejas y dos orejas. Entrada: Más de tres cuartos.