(Foto: Menacho)Va a ser difícil para Justo Hernández olvidar una temporada tan completa para su ganadería como la vivida durante el pasado curso. La regularidad ha sido ejemplar y el mejor aval de que esta divisa charra vive su momento de esplendor. Es la recompensa a un hombre que vive por y para el toro, que tiene muy asumido su papel de ganadero y sus objetivos a la hora de criar el toro que demandan no sólo las figuras, sino también los públicos. Muy lejos de lo que pueda parecer, el éxito no le ha hecho subirse a ninguna cima, sino todo lo contrario, anda con pies de plomo consciente de que la púrpura es efímera. Mientras tanto, saborea las mieles del triunfo pero sin perder el pálpito de la responsabilidad que conlleva estar en el punto de mira.
- “No creo que este éxito nos vaya a durar mucho tiempo, es algo circunstancial, la historia nos dice que no se puede estar tanto tiempo arriba”
- “El ganadero no busca que sus toros los maten las figuras, eso viene solo, el objetivo es lograr el toro que tienes en la cabeza, el que sueñas”
- “Nos gusta la embestida con personalidad y por personalidad entiendo una cualidad especial o incluso un defecto”
- “A veces a los ganaderos nos critican por una corrida que no ha salido bien o por una embestida de un toro, pero la ganadería es más que eso, hay muchos matices”
