Raúl Martín Burgos está feliz y motivado. Feliz, por su reciente salida en hombros del coso venteño. Motivado, por comprobar que su trabajo y esfuerzo han servido para demostrar con claridad que por méritos propios debe ser incluido en el circuito de las grandes ferias. Actualmente, Raúl dispone de madurez y juventud. De oficio y poso. Ello, unido a su ambición y a una cuadra variada y competitiva, lo convierten en un profesional cualificado para interpretar el toreo con verdad y emoción, al tiempo que vistosidad y vibración. Abrir la puerta grande de Madrid ha sido un serio golpe de atención en el toreo a caballo.
“Mi carrera estaba resultando dura y el invierno fue muy complicado. Pero tras lo de Las Ventas espero verme anunciado en las ferias”
“Cuento con varios caballos nuevos que se están forjando lentamente, y que debido a su calidad me tienen ilusionado”
“Mis mejores caballos son Atropín, de salida; Coimbra, Uruguay y Bolero para banderillas y Sol, de capa perla para el último tercio”