(Foto: Javier Arroyo)Detalles de Curro Díaz y Matías Tejela, que no pasa del tono medio con el mejor toro de la corrida.
FOTOS DE JAVIER ARROYO DEL FESTEJO
LA OPINIÓN DE PACO MORA: “Ha habido toros y toreros”
José Ignacio Uceda Leal ha cortado una oreja en el festejo de este martes en San Isidro. El clasicismo y el aroma torero del diestro de Usera, muy contundente una vez más con los aceros, fue lo mejor de un espectáculo en el que Curro Díaz fue silenciado con el lote de menos opciones y Matías Tejela saludó una ovación tras sortear el mejor toro de una desigual corrida de Fuente Ymbro.
Abrió plaza un buen toro de Fuente Ymbro, que si bien en los primeros tercios se mostró más endeble, en la muleta tuvo la virtud de ir a más. Cuando se afianzó, embistió con clase y largura por ambos pitones, y ante él Uceda Leal, asentado y convencido, puso en valor su concepto clásico en una faena despaciosa y conjugando bien el toreo sobre ambas manos. Al natural dejó muletazos buenos, aderezado todo ello de pases de pecho a la hombrera contraria, cambios de mano y pases del desdén. No fue faena redonda pero sí clásica. Mató de gran estocada. Oreja para el torero y ovación para el toro.
Serio, con mucha arboladura y ovacionado de salida fue el cuarto, que embistió a oleadas, de forma descompuesta, con la cara alta y poquita entrega. Uceda Leal brindó al público pensando que podría aplacar su temperamento, pero el toro protestó después. Mató de estocada y dos descabellos.
Curro Díaz fue silenciado tras pasaportar al segundo, un toro noble y manejable al que le faltó continuidad y mayor duración. En el segundo tercio destacó José Manuel Montoliu, obligado a saludar. El torero de Linares acertó en la elección de terrenos, entre las dos rayas, dejando naturales sueltos notables pero la falta de continuidad del toro hizo que la faena no terminara de conjuntarse. Cumplió Curro, que remató su actuación de estocada.
Hubo tablas entre los protagonistas del quinto capítulo de la tarde: ni el toro terminó de desarrollar la casta que pareció tener, ni el torero logró conjuntar una faena que calara en el público. El de Fuente Ymbro se movió descompuesto, exigiendo, pero no terminó de romper. El de Linares anduvo dispuesto en una labor de muchos muletazos, en la que hubo momentos sueltos buenos por los dos pitones. Faena tesonera, concluida de pinchazo y casi entera.
El tercero fue un gran toro: con clase, humillado, de embestida despaciosa, con entrega y bondad. Su matador, Matías Tejela, brindó su faena a Perico Capea y ejecutó después una faena de muleta en la que hubo disposición, corriendo bien la mano, pero que no terminó de estallar nunca. Hubo alguna serie de planta erguida por el pitón derecho en el núcleo central de su labor, pero sin terminar de calentar del todo el ambiente porque no siempre existió acople. Mató de estocada corta y dos descabellos, saludando una ovación tras aviso. En banderillas saludó montera en mano Jesús Romero.
Matías Tejela fue silenciado tras lidiar al sexto, un toro de buen juego en los primeros tercios pero que acabó aplomado demasiado pronto en el último. Perdió carbón y fuelle el fuenteymbro hasta terminar parado. Faena breve del madrileño, que concluyó de pinchazo hondo y dos descabellos.
Madrid, martes 27 de mayo de 2014. Toros de Fuente Ymbro, bien presentados, serios, varios ovacionados de salida, y de juego desigual. Destacaron el primero, bueno, a más; y el excelente tercero, de gran calidad. Uceda Leal: Oreja y silencio; Curro Díaz: Silencio en su lote; Matías Tejela: Ovación con saludos tras aviso y silencio. Entrada: Más de tres cuartos. Saludaron tras banderillear José Manuel Montoliu en el segundo, Jesús Romero en el tercero y Ángel Otero en el sexto. Montoliu y Romero, además, también destacaron con la capa.
