Fotos: JAVIER ARROYO
Octavio Chacón se escapó de milagro de la cornada cuando el primer “cebada” del festejo de este lunes en Pamplona le empitonó por el bajo vientre cuando se desplantaba rodilla en tierra ante los pitones. El gaditano giró sobre el pitón en unos segundos que se hicieron eternos. El invisible capotillo de San Fermín obró el milagro.