El de Concha y Sierra, por la calle. (Foto: Fernando Juárez)
Cartel de lujo para conmemorar el V aniversario en la realización de toros cerriles en este barrio de La Vall d’Uixó. Con una tarde primaveral se procedió a la suelta del primer ejemplar de Nuñez del Cuvillo. Toro bien presentado, bonito, jabonero de capa y bien armado de pitones. Salió rápido y tras dar un paseo por el recinto se desfondó y se aquerenció defendiéndose sin emplearse. En segundo lugar la comisión tenía preparado un ejemplar de Concha y Sierra. Tras salir el animal correteó un poco desentendiéndose de todo y de todos. Así transcurrió gran parte de su exhibición, el momento más vibrante lo realizó al subir parte de la escalinata de la iglesia. Por la noche se emboló otro ejemplar de Nuñez del Cuvillo. Toro que se dedicó a corretear sin demostrar bravura ni maldad aunque, eso sí, consiguió divertir al respetable con sus idas y venidas.
