Mucho se ha escrito y hablado, y aún se seguirá escribiendo y hablando, de la corrida celebrada el pasado día 1 de Junio en Córdoba, con Finito, Morante y Manzanares en el cartel…
Mucho se ha escrito y hablado, y aún se seguirá escribiendo y hablando, de la corrida celebrada el pasado día 1 de Junio en Córdoba, con Finito, Morante y Manzanares en el cartel. Había suscitado gran interés, como pudo demostrarse con una entrada de 3/4 de la plaza, que en la ciudad de los Califas es mucho, y ciertamente no defraudó puesto que pudimos ver buen toreo, con multitud de matices, de acuerdo con las características de cada uno de los maestros.
Juan Serrano hizo el toreo más clásico, mas profundo y de más calidad de la tarde. Se le vio con gran ilusión y entrega, hasta el punto de recibir a su primer toro con una larga cambiada de rodillas en el tercio, suerte que la ha realizado muy pocas veces en toda su carrera. A este le cortó una merecidísima oreja, que pudieron ser dos si no hubiese tenido que descabellar. Su segundo fue un inválido, inservible.
Morante estuvo en Morante inspirado, genial, con capote y muleta, hasta donde sus toros se lo permitieron. Fueron sus dos faenas más de inspiración y emotivas que profundas, como he leído en Internet, pues los toros no permitían otra cosa.
Manzanares estuvo muy bien aunque sus toros fueron no aptos para triunfar fuerte, si bien en su primero hubo momentos de gran belleza.
En definitiva el público asistente salió muy satisfecho de la plaza, deseando volver a verles, de nuevo, juntos en el mismo cartel, pero a ser posible con ganado más apropiado.
No soy muy original si digo, porque lo han dicho otros antes, que los empresarios deberían tomar nota y repetir el cartel más veces; son tres grandiosos toreros, artistas, pero diferentes, en plena madurez. Desde mi punto de vista, montar un cartel con más interés que este resulta verdaderamente difícil, si no imposible.
Creo que es algo que está en la calle, que comentan los aficionados por lo que, aun a riesgo de equivocarme, estoy seguro de que el empresario más creador, más inquieto e innovador de los que hoy organizan ferias en España y Francia, es decir don Simón Casas (“el empresario artista”) ya estará pensando en ponerles en algunas de sus plazas. Hay otros empresarios más modestos, por ahora, que me temo también ya estén pensado montar el cartel de Córdoba en Sanlúcar de Barrameda, porque también siempre andan buscando fórmulas para dar lo mejor a su clientela. ¡Ánimo Carmelo y Caba!
