El Soro muestra a Su Santidad el capote con las imágenes de la Virgen de los Desamparados y de Guadalupe.“El obispo de Tijuana, que fue el que nos casó, nos lo consiguió. Él sabía la enorme ilusión que, tanto a Suzette como a mí, nos hacía este hecho. El que fuéramos de luna de miel a Italia no fue por otro motivo que para que se hiciera realidad nuestra visita al Papa. ¡Tuvimos la suerte de poder lograr hablar con él! Yo llevaba desplegado un capote de brega con las efigies de la Virgen de Guadalupe y de los Desamparados, y en cuanto me vio me preguntó que si era torero. Le dije que sí, y además español y casado con una mexicana. Su Santidad nos cogió la cara y nos bendijo el capote”. Con estas palabras relató El Soro en Aplausos su bonita experiencia.
¿Qué impresión le causó encontrarse ante el Papa frente a frente?, le preguntó José Luis Suárez-Guanes para nuestro semanario, respondiendo El Soro: “Fue muy emocionante y realmente emotivo. Las lágrimas se me saltaron. Repito, fue algo realmente emocionantísimo. Pienso que, además, he sido el primer torero que ha estado delante del Papa, que me ha hablado, que nos ha tocado…”, relataba el de Foyos a la vez que quien suscribía el texto expresaba: “Seguramente sí ha sido el primer matador de toros que se ha postrado delante del Papa actual, pero creo recordar que Antonio Ordóñez y Manolo Vázquez visitaron a Juan XXIII allá por los inicios de los sesenta”. No erraba en su vaticinio Suárez-Guanes pues, en efecto, aquel Papa recibió a ambos diestros en el Vaticano el 18 de febrero de 1961.
Así pues, se da la circunstancia que los dos últimos Papas canonizados como Santos, Juan XXIII y Juan Pablo II, tuvieron encuentros con toreros de sus respectivas épocas.
