(Foto: Romi)El ganadero Tomás Prieto de la Cal fue el gran protagonista de la charla que se celebró el jueves 27 de enero en Puçol dentro de las Jornadas Taurinas de dicha localidad valenciana.
Sobre la 19:30 de la tarde, en el Sindicato Agrícola de Puzol, dio comienzo la charla que tuvo como gran protagonista al ganaderro Tomás Prieto de la Cal. El acto estuvo presidido por el alcalde de la localidad, José Vicente Martí, siendo presentado por el moderador local Salvador Almenara y el periodista taurino Salvador Ferrer.
Tomás Prieto de la Cal inició el acto resaltando que el principal problema que tiene la Fiesta es que hay mucha gente que ha dado la espalda al toro dejando éste mismo de ser el eje principal de la Fiesta como antaño. Tras una breve explicación de la historia de su ganadería la cual fue adquirida en 1945 por D. Tomás padre la cual, la formó con reses oriundas de Veragua, tras el fallecimiento del mismo en 1975 pasó a anunciarse a nombre de su hijo, el cual mantiene dicho encaste ya que posee los últimos toros del puro encaste Veragua.
El ganadero explicó que lo que busca en sus toros es que desprendan gran cantidad de bravura, aguantando la lidia e intentando que sepan estar en su sitio. Para Tomás el principal problema de la Fiesta, son los toreros como los que acudieron a Moncloa, que piden en nuestras plazas toros de ganaderías que año tras año fracasan y no dando oportunidad a ganaderías con un encaste más duro, las cuales darían mucho más juego y menos ventaja al torero. Recrimina también al Ministerio de Cultura de que las cosas no se están haciendo bien, el cual compara con el país vecino, el cual ha creado unos buenos cimientos para sostener la Fiesta, resaltando que no se invierte lo suficiente.
En cuanto a los festejos populares, resalta que todo lo que sea bien para el toro, él estará a favor, comentando que el buen aficionado al toro en la calle, si tiene un buen cartel en la plaza, también acudirá a las corridas. Aprovechando la ocasión se le procedió a la pregunta de que corrían rumores de que este año se soltaría algún ejemplar de su ganadería por las calles de Puçol, el cual no aseguró nada ya que su camada es muy corta y no sabe si dispondrá del toro adecuado para Puçol, diciendo que si no es este año será al que viene.
Otro punto en el que se muestra contrario es respecto a la manipulación de las astas. En este sentido destacó lo antiestético y humillador que es ponerle fundas a los toros, explicando que bajas en las ganaderías siempre han habido, pero un toro debe conservarse como vino al mundo. El toro que se daña los cuernos si no se puede lidiar en una plaza importante que se lidie en un festival, rejones o puerta cerrada, ya que muchos ganaderos de España sólo ven al toro en la parte económica.
El ganadero pide a las plazas, apoderados y empresarios que sean un poco más permisibles y que porque un chaval haya tenido una mala temporada, no se eche por tierra un mal año lo puede tener cualquiera, porque de un año para otro no se solucionan las cosas.
