Encierro rápido, peligrosísimo y, milagrosamente, limpio

El segundo día de San Fermín le ha correspondido a Miura, en un multitudinario encierro, veloz (2.27’’) y peligrosísimo, ya que un toro, “Navajito”, se adelantó pronto de la manada –en el tramo del Ayuntamiento ya iba unos metros por delante- y completó la carrera en solitario arrollando a numerosos corredores a su paso y sembrando el pánico en las calles de Pamplona, donde no cabía ni un alfiler.

Arreones, empujones, caídas, golpes… pero milagrosamente sin ninguna cogida y ninguna atención hospitalaria grave. Hoy el capotillo de San Fermín tuvo trabajo.

Miura es todo un clásico en Pamplona, ya que hasta hoy había participado en 33 Ferias del Toro (sólo en 32 encierros). En su historia  ha dejado 12 cornadas (6 en los últimos cuatro años y una media de 0,38 con 4,97 heridos de media total), convirtiéndose en la sexta ganadería con más corneados y la primera en traumatismos y heridos. Además, los encierros suelen ser lentos con una media de 3,30 por encierro, aunque suelen ir en grupo y jamás han sobrepasado los seis minutos. Como encierro más peligroso se recuerda el de 2009, con cinco corneados y “Ermitaño” de protagonista, corriendo en solitario y produciendo las escenas de pánico.

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