Enrique Ponce abre la puerta grande en Huesca

Acceda a la galería de la noticia

Fotos: PHILIPPE GIL MIR

El primero de la tarde tuvo una salida un tanto abanta, pero Enrique Ponce, con un trato muy sutil, consiguió quedarse con la embestida del de Vellosino y dibujar media docena de verónicas y una media con mucho sabor. Sin tener mala condición, el toro anduvo muy justo de fondo y raza. El valenciano entendió a la perfección la embestida de su oponente, construyendo un trasteo de perfecto planteamiento técnico que remató con una estocada que se fue un punto baja, teniendo que usar el descabello tras levantar al toro el puntillero.

Muy deslucido resultó su segundo, ante el que Enrique Ponce volvió a tirar de oficio y pundonor, estando muy encima del toro en una faena que no pudo tener brillo. Mató de estocada algo defectuosa, premiándose su voluntad con una oreja. El quinto de la tarde no tuvo emoción alguna. Enrique Ponce realizó una faena tesonera, de largo metraje, que se desarrolló, en gran medida, entre la indiferencia del tendido. Fue al final de la faena cuando, tras dos poncinas, el tendido reaccionó y se entregó al valenciano que, tras matar de casi entera y descabello, fue premiado con dos generosas orejas.

El segundo de la tarde fue un astado muy deslucido. Su falta de clase y fuerza no dio opción alguna a El Juli a pesar de su disposición. Cogido con alfileres anduvo el cuarto de la tarde. Su fondo manso y su falta de raza obligaron a El Juli a hacer un esfuerzo para poder llegar al tendido. Anduvo por encima el madrileño, que paseó un trofeo tras matar de una estocada.

El Juli tuvo que pisar el acelerador para no marcharse a pie en el mano a mano y para poder sacar partido de la nula condición del sexto. El oficio del madrileño le permitió imponerse a las circunstancias y arrancar una oreja de un astado muy deslucido. Mató de estocada y descabello.

Huesca. Domingo 12 de agosto de 2018. Feria de la Albahaca. Toros de Vellosino, desiguales de hechuras y deslucidos por falta de raza. Enrique Ponce, silencio, oreja y dos orejas; Julián López “El Juli”, silencio, oreja y oreja. Entrada: Lleno. Tras romper el paseíllo se rindió un homenaje a la SD Huesca por su ascenso a primera división.

Acceda a la versión completa del contenido