Me hubiera encantado volver a charlar contigo de eso que tanto te gustaba, eso que te hizo cruzar la frontera hace ya más de una decada, eso que hizo…
Te has ido sin despedirte, dejándonos un gran dolor y un vacío enorme en el corazón. Te has ido para siempre y no lo podemos remediar. Me hubiera encantado volver a charlar contigo de eso que tanto te gustaba, eso que te hizo cruzar la frontera hace ya más de una decada, eso que hizo que te jugaras la vida porque decías que te llenaba de vida al sentirlo. EL ARTE. Era un sentimiento que lo tenías dentro, te abrasaba, necesitabas liberarlo, estudiabas para ello, pero solamente lo expresabas de manera completa delante del toro bravo. Y con tu increíble valor, tu máxima afición y tu enorme personalidad lo sacaste en muchos ruedos de todo el mundo, dejando boquiabiertos a propios y extraños. Porque que no te quepa duda que lo conseguiste, puedes estar muy orgulloso de ti, eras un ARTISTA, eras un TORERO. Así, en mayúsculas, y por si eso fuera poco, eras una gran persona, de lo mejor que he conocido en esta miserable vida, que viene y se va, que es tan cruel pero a la vez tan bella, tal y como a ti te gustaba verla. Te voy a recordar para siempre, porque eres inolvidable, te recordaré con tu carisma que te hacía diferente, te recordaré en la cara del toro, como nos conocimos, sacando a pasear el alma en cada recorte, toreando, creando arte. Adiós amigo mío. Hasta siempre mon ami. A la memoria de David Casarín, gran recortador y mejor persona. D.E.P.
