-¿Cómo valora la confección de la feria teniendo en cuenta que están los principales novilleros del escalafón mezclados con otros que han sido revelación en este final de temporada?
-Los carteles están muy bien compensados. Todos los días de la feria hay novilleros con peso en el escalafón junto a otros que necesitan dar un toque de atención, finalmente han resultado unas combinaciones muy rematadas. Valoramos los nombres que había encima de la mesa junto al consejo sectorial y decidimos estos carteles, en los que hay una equilibrada medida de todo, tanto en novilleros como en ganaderías.
El consejo sectorial o comisión hace una gran labor en el Zapato de Oro. ¿Es un trabajo conjunto?
-El consejo sectorial tiene la última palabra aunque la empresa asesora a la hora de rematar los carteles e incluir a los novilleros, luego las labores de gestión, publicidad y diversas cuestiones del día a día las llevamos a cabo nosotros. La comisión propone los nombres de diversas ganaderías y dentro de ellas yo elegí esas cinco, pero en los novilleros ellos tienen la última palabra.
-Ahora que me menciona las ganaderías, el elenco es diverso, con varios encastes representados como Albaserrada, Núñez y Domecq. ¿Es una filosofía propia del certamen?
-La variedad de encastes es muy característica de Arnedo pero también es algo que viene con mi personalidad, me gusta apostar por ella. Sean del encaste que sean, las novilladas que vienen están muy bien presentadas aunque hemos priorizado las hechuras por encima del volumen, hay un trabajo en lo que al campo se refiere muy importante.
-Es Arnedo y su Zapato de Oro uno de los mayores bastiones en lo que al escalafón novilleril se refiere, siendo un ejemplo de cómo hacer las cosas. ¿Siente responsabilidad al ser el empresario del Zapato de Oro?
-Tengo una presión y una responsabilidad muy fuerte. Ya no solo como empresario, sino como aficionado porque para mí el Zapato de Oro es la mejor feria de novilladas, por lo que no quiero fallar por nada del mundo. Le he puesto mucho cariño y no quiero defraudar a la afición, que es muy joven en Arnedo y creo que eso es para tener en cuenta.
-Siempre ha sido Arnedo un lugar de culto por el que todos los novilleros quieren pasar.
-Ese es mi pensamiento también, todos tienen una ilusión tremenda por ganar el Zapato de Oro, porque además muchos toreros salen lanzados de aquí. Eso lo intento transmitir, la ilusión que tengo por hacer esto bien.
-Es muy complicado dar novilladas a día de hoy porque prácticamente tienen el mismo gasto que una corrida de toros. ¿Como vs el estado de las novilladas con picadores actualmente? ¿Cree que hay alguna solución para solventar los problemas que conlleva montar una novillada con picadores y que así más empresas se animen a organizarlas?
-Es un tema complicado. En mi opinión hay que poner a los mejores o los que tienen de verdad cualidades para atraer a los públicos, procurando que cuando los aficionados que vayan a la plaza a ver una novillada salgan contentos y con ganas de seguir a esos chavales a otras plazas, no hay mejor solución que esa.
-¿Cómo de clave es la labor del Ayuntamiento?
-Hace un esfuerzo tremendo apostando por las novilladas y gracias a ello podemos sacar todo esto adelante, pese a los elevados costes que tiene. El alcalde es un gran aficionado y todo su equipo confía en mi gestión, me siento un privilegiado por ello.
-Póngale una nota a la feria.
-No le pondría un número, pero para mí es una feria muy buena e ilusionante. Mi responsabilidad me hace no poder decirle nada más, solo mi deseo de que los novillos embistan y los novilleros puedan dar todo lo que llevan dentro, ojalá se pueda ver todo el trabajo que hay detrás.
