Jesús Chover, puerta grande en Valencia

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Fotos: ALBERTO DE ISIDRO

La entrega de Jesús Chover durante toda la tarde fue indiscutible. Y el premio a toda su fe y ganas de triunfar fue la puerta grande lograda frente al cuarto, al que le cortó las dos orejas. El valenciano se llevó el lote de una desigual novillada de Fernando Peña y a sus manos fueron a parar los dos mejores utreros -extraordinarios ambos- del envío del ganadero de Castellón. Ángel Téllez dejó pinceladas de su buen concepto y Alejandro Gardel quedó prácticamente inédito en su debut en Valencia.

Jesús Chover puso todo de su parte y más en busca del triunfo. El valenciano se templó y se gustó por momentos, especialmente lucido fue su manejo del percal: templadas y cadenciosas las verónicas, sabrosa la media y sorprendente la improvisación para quitar al novillo del caballo por gaoneras primero y chicuelinas después. El valenciano, entregado, queriendo y dispuesto, no se guardó nada dentro ante un importante utrero de Fernando Peña, bravo, pronto y de notable fondo.

Al igual que en su primero, Chover echó las rodillas al suelo -en las dos ocasiones más allá de la segunda raya-, banderilleó con facultades, aunque con más disposición que brillantez y, de nuevo, hizo una exhibición de entrega desmedida. Ante este cuarto surgió la versión más pasional de Chover. El inicio de rodillas encendió la llama y, a partir de ahí, una faena enfibrada y de mucho corazón. Las ganas del valenciano pudieron con todo. El novillo de Peña, importante, puso mucho de su parte en el éxito. El público pidió con fuerza las dos orejas. La puerta grande fue el premio a sus deseos de triunfo.

Ángel Téllez aplicó temple y pulso a la anodina embestida del tercero, un novillo con tanta nobleza como falta de transmisión. El madrileño sacó a relucir sus buenas formas al natural, de uno en uno surgieron muletazos de bello trazo pero la faena, de largo metraje, no rompió. Una voltereta sin consecuencias. Y un mal remate con la espada.

Volvió a dejar muestras de su buen gusto en el saludo capotero al sexto, templado, encajado y jugando bien los brazos. El madrileño le dedicó más tiempo del que mereció el novillo de Peña, deslucido, sin entrega ni clase alguna. La faena no pasó de la corrección y el voluntarismo.

Poca suerte tuvo Alejandro Gardel en su presentación en Valencia, que se estrelló ante un novillo escaso de fuerzas, sin clase ni empuje. Se justificó el madrileño. No corrió mejor suerte con el quinto, un novillo manejable pero vacío de raza y transmisión ante el que lo intentó en vano.

Valencia, lunes 12 de marzo de 2018. Feria de Fallas. Novillos de Fernando Peña, bien presentados a excepción del segundo, falto de remate. Desiguales de juego. Importantes los jugados en primer y cuarto lugar. Jesús Chover, vuelta al ruedo tras petición y bronca al palco y dos orejas; Alejandro Gardel, silencio en ambos; Ángel Téllez, silencio tras dos avisos y silencio tras dos avisos. Entrada: Algo más de un cuarto. Se desmonteraron en el sexto Juan Navazo y Niño de Santa Rita.

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