Arrancó la temporada y la feria de San Blas en Valdemorillo con una buena entrada en los tendidos de La Candelaria.
Cerró la tarde el novillo más fino del encierro extremeño. Corpulento y alto pero fino de cabos. Resultó algo distraído de salida pero se fue centrando a lo largo de la lidia. Navalón volvió a demostrar su disposición y su facilidad. Faena brindada al público, muy asentada de trazo largo y dirigiendo muy bien la embestida. Respondió el novillo a la exigencia especialmente por el derecho, por el izquierdo se lo pensó más y soltó algunos derrotes a destiempo. Le funcionó bien la cabeza al de Ayora, que lo administró muy bien y tuvo sentido de la medida. Se volcó sobre la espada en la suerte suprema resultando trompicado.
Samuel Navalón salió muy enfibrado desde el saludo capotero al tercero. Abriendo el compás, echando los vuelos por delante y llevando la embestida muy encajado. Empujó mucho en un largo puyazo el de La Cercada, que desplazó varios metros al caballo. Casi resulta atropellado en las chicuelinas, que resolvió con una bonita revolera. Se echó de rodillas en los medios tirando la moneda: afarolado y varios vibrantes derechazos. Recuperada la vertical lo llevó largo en buenos derechazos mientras la embestida se fue descomponiendo. Acortó entonces distancias arrollando la razón en un tremendo alarde de valor. Bernadinas en las que resultó atropellado. Estocada algo desprendida. Oreja con petición de la segunda.
El melocotón que hizo quinto pareció tener otro aire en los primeros compases. Nek Romero lo lanceó genuflexo. En el inicio por estatuarios recibió una dura voltereta aparentemente sin consecuencias. Se repuso para poder al novillo con sobriedad, a lo que respondió con mansa huida sin opciones. Lo intentó por todos los medios el valenciano antes de cobrar una estocada. Ovación.
Antes, Romero lanceó con armonía al segundo, que atropellaba en sus primeras embestidas. Quitó con airosas chicuelinas. El valenciano brindó al público en una faena con dos fases. Una primera poderosa en la que empujó la embestida adelante y una segunda más relajado. Al de La Cercada le faltó siempre un tranco aunque tuvo la virtud de la obediencia. Requirió traerlo siempre muy enganchado por delante, le faltó recorrido por el pitón izquierdo. Nek logró imprimir cadencia al natural pasándoselo muy, muy cerca del mismo modo que con las bernadinas finales -que fueron de infarto-. Se atascó con la espada. Saludos tras aviso.
Ismael Martín dominó la situación con el bronco cuarto que, aunque recogía la cara, la falta de cuello y la alzada le delataban. Meritorio fue el tercer par. Empezó de rodillas en los medios con un pase cambiado por la espalda. Estuvo con mucha disposición y oficio, limando las asperezas del oponente. Finalizó con manoletinas. Pinchó antes de cobrar una estocada defectuosa. Palmas tras aviso.
Ismael Martín recibió al primero de La Cercada con lances rodilla en tierra. El novillo acudió alegre al caballo pero se dolió muy rápido, síntoma que evidenciaría la condición desarrollada después. Martín cogió las banderillas con voluntad, el novillo no tuvo fijeza en el tercio y empezó a acusar querencias. En la muleta se vio rápido su falta de raza, el salmantino porfió sin posibilidad de pegar una serie compacta debido a la mansedumbre. Arrolló en lugar de embestir. Estocada trasera. Silencio.
Valdemorillo (Madrid). Viernes, 9 de febrero de 2024. Primera de la Feria de San Blas. Novillos de La Cercada, bien presentados aunque de escaso fondo. Ismael Martín, silencio y palmas tras aviso; Nek Romero, saludos tras aviso y saludos; y Samuel Navalón, oreja con petición de la segunda en ambos. Entrada: Más de dos tercios.
