Fotos: ARJONA
Los aficionados sevillanos esperan cada año el último día de feria para poder disfrutar de una ganadería emblemática en la ciudad, la corrida de Miura, que como viene siendo habitual es la encargada de poner el broche final al serial maestrante. Más de tres cuartos de siglo lleva el hierro de Zahariche presente en Sevilla, algo que para sus ganaderos es todo un honor. “Es un placer volver a lidiar en Sevilla y que la empresa un año más cuente con nosotros”, relata Eduardo Miura. “Si no me equivoco, esta será la corrida número 77 que lidiemos en la Maestranza ininterrumpidamente. Algunos años, por agua, se ha tenido que suspender y no se ha dado pero sí podemos decir que 77 años seguidos hemos estado anunciados, algo que no es muy habitual. Primero porque tiene que durar el ganadero -ríe- y después que estén dispuestos a anunciarnos”. Además, el vínculo que une a la familia Miura con la Maestranza se remonta a hace casi doscientos años. “Somos sevillanos, mi familia ha tenido una relación con la Maestranza durante muchos años y no sólo como ganaderos, sino que cuando tenía la fábrica de sombreros le vendían sombreros para la Maestranza allá por 1830… Ahora, con los toros, pasa algo similar, la empresa siempre ha contado con nosotros y nos ha dado confianza en esos años en los que las cosas no salen como uno quiere para que sigamos presentes”.
Y es que Miura no podría llegar a entenderse sin esta plaza hispalense, donde son un emblema entre los ganaderos. “A todos los ganaderos nos gusta lidiar en Sevilla por la categoría de la plaza, la categoría de los aficionados… Sevilla es especial y un triunfo en esta plaza es un gran premio”, reconoce don Eduardo. Pese a la importancia de esta cita para el hierro de Zahariche, su ganadero admite que la responsabilidad y el nerviosismo son los propios de un acontecimiento como este. “Nosotros somos responsables y conscientes de lo que significamos pero no sólo en Sevilla. Sea Valencia, Pamplona, Bilbao, Madrid… cuando tu nombre es un poco la base de la corrida eres consciente de la responsabilidad. Aunque estemos arriba nos siguen analizando corrida a corrida. Estamos en el grupo de cabeza con una serie de ganaderos, eso es cierto, y lo que uno intenta es seguir en ese grupo, en el que da ruido y eso requiere una exigencia máxima sea donde sea”.
Eduardo Miura: “Nuestra mayor satisfacción es que un toro nuestro le dé un impulso a un torero, es la mejor señal como ganadero y a lo largo de nuestra historia ha pasado en varias ocasiones”
Este año el cartel que da forma a la corrida de Miura es un mano a mano inédito con dos toreros también de la tierra: Manuel Escribano y Pepe Moral. “A nosotros no nos suelen consultar el cartel, lo que haga la empresa bien hecho está porque su misión es buscar unos toreros que se adapten bien a nuestros toros. En este caso es un cartel interesante porque tanto Escribano como Moral, que triunfó el año pasado con nuestra corrida, son dos toreros que pueden conseguir mucho con nuestros toros. Es un cartel atractivo porque en el momento que los toros ayuden, los toreros no van a dejar pasar la oportunidad”, afirma el ganadero, consciente además de que sus toros le han brindado la oportunidad a ambos toreros a reengancharse al gran circuito. “Es la mayor satisfacción para nosotros, que un toro nuestro le dé un impulso al torero es la mejor señal como ganadero. Además, es algo que a lo largo de nuestra historia ha pasado en varias ocasiones”.
En cuanto a la corrida que llevarán el próximo domingo a Sevilla, Eduardo comenta que se trata de “una corrida de toros para Sevilla pero hasta que no pase el reconocimiento no sabremos los que se lidiarán. Es una obviedad decir que llevaremos una corrida de toros apropiada para la plaza aunque hasta el día 22 no quiero adelantar nada porque pueden pasar mil cosas hasta esa tarde. Habrá que esperar para ver cómo transcurre todo. Ojalá sea un día importante para todos”.
