Picazo, con el cuarto de la tarde. (Foto: Vivas)Ni Picazo, ni De Justo -que escuchó los tres avisos-, ni Lancho sacaron rédito de un encierro que ofreció hasta cuatro toros con posibilidades de éxito.
La terna que actuó esta tarde en Las Ventas perdió una buena oportunidad de reivindicarse en el undécimo festejo de la feria de San Isidro. El encierro, compuesto por cuatro toros de Los Bayones -hierro titular- y dos de José Luis Pereda, brindó posibilidades a los toreros, que por unas cosas o por otras no terminaron de aprovechar la ocasión. Sólo resultó imposible, por complicado y peligroso, el tercero de la tarde, primero de los dos remiendos de Pereda. El resto se dejaron en mayor o menor medida, especialmente los dos primeros toros y el cuarto de la tarde, el otro de la divisa onubense.
Gabriel Picazo se enfrentó en primer lugar a un ejemplar de Los Bayones manso pero de gran condición en la muleta. Con él, anduvo el torero templado y por momentos con cierto gusto pero no terminó de redondear una actuación que fue culminada de medio espadazo del que resultó cogido y herido en un dedo. Con el cuarto, un buen toro de Pereda, su labor no pasó de intermitente.
No fue la tarde de Emilio de Justo. Con su primero, otro importante animal de Los Bayones, no terminó de acoplarse y sus reiterados fallos con la espada le hicieron escuchar los tres avisos. En el quinto, un toro de enorme trapío y el de menos fondo de los cuatro de Bayones, tampoco hubo acople en una labor desdibujada y esta vez sí bien culminada con la espada.
Israel Lancho, por su parte, se jugó los muslos con el peligroso ejemplar de Pereda que mató en primer lugar. Esa faena la brindó al doctor Máximo García Padrós y a todo el equipo médico que le salvó la vida el pasado año en esta misma plaza. Con el que cerró plaza, otro manejable toro de Los Bayones, no pasó de voluntarioso y, eso sí, mató con efectividad.
Madrid, 16 de mayo de 2010. Toros de Los Bayones y José Luis Pereda (3º y 4º). 1º, manso pero de buena condición en la muleta. 2º y 4º, buenos. 3º, peligroso. 5º, a menos. 6º, manejable. GABRIEL PICAZO: Ovación con saludos y silencio; EMILIO DE JUSTO: Silencio tras tres avisos y silencio; ISRAEL LANCHO: Silencio y silencio. Entrada: Lleno.
