El Pais Vasco se refuerza a golpe de carteles. La mejor forma de luchar contra la crisis es la calidad. Bilbao, desde toda la vida, como dirían por allí, apuesta por dos cosas. Conservar limpias las tradiciones y rematar ferias caras. La de este año es de alto presupuesto. Pero la de Donosti no sólo no le va a la zaga sino que con la “corrida monstruo” de los seis espadas figuras con seis toros en un mismo cartel, puede ser una fecha de reivindicación solidaria, de reafirmación de San Sebastián en lo taurino. Es un gesto, una declaración, una forma de decir que se es y se está. Hay una apuesta firme tan evidente que arriba se juegan los cuartos, expuestos a la duda sobre que va a suceder en agosto.
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