(Foto: Chele Ortiz)Lista la segunda gran apuesta por los novilleros en la fecha del Motín: “Una plaza con pasado debe pensar en el futuro”, afirma Lozano.
Aranjuez acoge este domingo una novillada con seis de los nombres propios de la temporada novilleril: Gonzalo Caballero, Borja Jiménez, Francisco José Espada, Lama de Góngora, Álvaro Lorenzo y José Ruiz Muñoz. Una nueva apuesta de los Lozano por los jóvenes valores que sirve para alimentar el escalafón más afectado por la situación actual y adaptarse a los tiempos presentes.
Pablo Lozano hijo, cabeza visible de la familia al frente de la bicentenaria plaza, ha apostado un año más por la cantera. “Los seis han dado toques de atención importantes a lo largo de la temporada: Puertas del Príncipe, indultos, puertas grandes en general, trofeos en Madrid… aquí están seis de los novilleros que más han dado la talla”, asegura Lozano. Todos deberán mostrar de nuevo sus credenciales ante una novillada de Alcurrucén, “apta para una plaza de segunda, con presentación y trapío adecuados, sin ser una corrida de toros; hay tiempo para todo y ya lo tendrán para enfrentarse a empeños mayores”. En cuanto al comportamiento, un misterio siempre hasta que sale el toro a la plaza, pero la voluntad del empresario, ganadero también, es clara: “Queremos que salga el novillo colaborador, pero que al mismo tiempo transmita y tenga seriedad y emoción; el toro tiene que facilitar el triunfo para que el torero muestre también su capacidad y conocimiento”.
LA APUESTA CONLLEVA SANCIÓN
Los carteles anuncian el festejo como “La segunda cita con el futuro del toreo”, pero Pablo Lozano ha tenido un nuevo desencuentro con la Administración. El pliego de condiciones aceptado y firmado hace cinco años exige que Aranjuez acoja dos corridas de toros: una por San Fernando y otra, por El Motín, en septiembre. Sin embargo, el empresario considera que, dada la situación actual y dado que una corrida de toros resultaría deficitaria, la mejor opción es apostar por los nuevos valores: “Es verdad que el pliego pone que debe ser una corrida de toros pero entiendo que en estos momentos es más lógico dar algo que sirva. Y que sirva es pensar en el futuro”. Y añade: “Una plaza como la de Aranjuez, si se diferencia de algo, es que tiene más de doscientos años de historia, por aquí han pasado todas las figuras del toreo, -también desde que la gestionamos nosotros- y, evidentemente, una plaza que tiene pasado, debe pensar en el futuro”.
Por esta decisión, tuvo que abonar el año anterior 1.500 euros en concepto de sanción. En esta ocasión, por reiteración en el incumplimiento de contrato, deberá abonar igual cantidad o superior. La misma que abonaría en el caso de no organizar ningún festejo. “La sanción lo mismo me implica dar una novillada o no dar nada; no dando nada, acepto la multa y no pongo nada en juego, pero aquí estoy apostando. El año pasado hubo que hacer muchos números y se asumieron pérdidas, pero de cara al futuro de la fiesta, no por capricho”.
Lea AQUÍ la entrevista completa en su Revista APLAUSOS nº 1927
