(Foto: Julián López)
Pocas opciones dio el sexto, al que le faltó motor y con el que Manzanares tan sólo pudo que dejar algún detalle.
El quinto fue un ejemplar al que le faltó brío pero tuvo nobleza y calidad. El Juli puso empeño, ganas y esfuerzo y al final logró una faena aseada. Con el toro muy parado, se metió entre los pitones para amarrar el triunfo. Mató de estocada y a sus manos fue a parar una oreja.
Morante no quiso ver al cuarto de la tarde, con el que abrevió pronto y el público se quedó sin ver la condición del toro.
Manzanares se las vio con un toro bueno y con calidad al que le cuajó tandas sobre ambas manos con porte y elegancia. Le faltó un punto de transmisióon a su trasteo y tras leve petición, saludó una ovación.
El Juli estuvo muy por encima del segundo de la tarde, al que le faltó empuje. Pero el madrileño fue poco a poco metiendo al toro en el canasto y logró elaborar una faena que destacó por su limpieza y autoridad. Pinchó en dos ocasiones antes de dejar una contundente estocada. Oreja
Morante de la Puebla se ha topado en primer lugar con un toro que no acabó de romper. A la faena le faltó mayor rotundidad ya que al toro le costaba repetir en la muleta. Comenzó con naturales pero estuvo mejor Morante con la diestra. Mató de media lagartijera.
Toros de Daniel Ruiz. MORANTE DE LA PUEBLA: Aplausos y pitos; EL JULI: Oreja en ambos; MANZANARES: Ovación y silencio. Entrada: Media plaza
