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Pura sangre

Ensimismado, serio, inasequible al desaliento, tozudo si es necesario, sin concesiones y con un objetivo irrenunciable, seguir avanzando, triunfar. En el toreo, naturalmente. Fue torero revelación y es un año después un valor consolidado. En realidad nada definitivo, quiere más. Es el mismo torero que ha hecho del toro su argumento. Parece una obviedad pero no lo es tanto en los tiempos que corren, así que la afición se lo agradece y él insiste sin resquemores: “Quiero el toro a mi lado”. El mismo que hace de la dureza de la lidia un gustazo personal, el tipo que al sufrimiento llama disfrute: “Ahí es cuando me siento feliz, cuando menos me cuesta sonreír”, nos ha dicho. Un tipo sin dobleces, claro en sus planteamientos, en la calle y en la plaza, que se admite como raro, esa debe ser su coraza para que nadie perturbe sus avances…

…Seguramente le falte el resplandor de las estrellas, por ahora, pero tiene el valor del valor que en el toreo es mucho por no decir todo y un buen atajo para llegar al estrellato. A punto de comenzar la temporada 2013 es una apuesta a caballo ganador con permiso de la buena suerte, naturalmente, la misma buena suerte que él ha perseguido sin desmayo desde que siendo un chavalín saliese desde su Orduña natal a conquistar el mundo. En ello está. Cada vez más cerca. Ni qué decir que les hablo de Fandiño, Iván Fandiño, el vasco que conquistó Madrid y Sevilla y Valencia y Mont de Marsan…

– “Prefiero escoger a quien tengo delante que estar pendiente de quien tengo a los lados. No me quejo de no torear con algunos. De esta manera he conseguido lo que tengo. En un principio me hubiese gustado medirme con todos ellos pero ahora es algo que no me quita el sueño”

– “Muchas veces he tenido que hacer cosas diferentes para sacar la cabeza. No podía ir al ritmo de los cánones y tenía que hacer algo que la gente no estaba acostumbrada a ver para seguir flotando y poder llegar a la orilla”

– “Yo soy consciente de que tengo una responsabilidad determinada y necesito que conmigo el toro aparezca bien presentado y que tenga lo que tiene que tener un toro”

– “En Madrid escogeré hierros muy de mi gusto, nombres de esos que algunos toreros no quieren torear. Jugaré la baza de los encastes en todas las plazas. Es una apuesta por la variedad”

– “El G10 no he visto que haya conseguido nada ni creo que haya sido la mejor de las maneras de intentar hacer algo. Yo no creo en esas cosas”

– “De Fuente Ymbro me quedo con su fondo. Cuando les pides te responden, lo sacan de donde sea pero lo tienen. De Gavira valoro la personalidad. De Adolfo el temple. De Pereda la transmisión y calidad. Y de Alcurrucén su fondo y movilidad”

– “Mi apoderado es más raro que yo. Un cabrón que achucha, un hermano, un padre. La voz que me guía, mi otro yo. El hombre que confió en mí y dijo que yo podía llegar donde ahora estoy”

Lea la entrevista completa en su Revista APLAUSOS