Roca Rey conquista Illescas

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Fotos: JULIÁN LÓPEZ

La gran expectación despertada por el cartel de primavera de Illescas se materializó en un lleno de ‘No hay billetes’, pese a la baja de Manzanares. El primero de José Vázquez, anovillado en su rizada expresión, tuvo ímpetu de salida. Morante de la Puebla lo recibió con mucha actitud dejando tres verónicas colosales y una media monumental. El toro apuntó falta de fuerza pero tuvo chispa en su arrítmica embestida por lo que se picó en dos ocasiones. Morante brindó la obra al Rey Emérito, Juan Carlos I. El inicio de la faena fue una sucesión de carteles de toros: un doblón rodilla en tierra por cada pitón, un trincherazo, un pase del desprecio y un pase de pecho. Pura torería. Por el pitón derecho se ceñía más el de Vázquez, por ambos pitones obedecía. Morante lo apretó por ese pitón cuajando derechazos templados. Por el izquierdo se había quedado la labor en detalles hasta que Morante, a base de actitud, extrajo una serie tan meritoria como bella. La espada quedó arriba y la oreja concedida fue unánimemente pedida.

El segundo de José Vázquez estuvo mejor presentado, tocado arriba de pitones. No se definió hasta el segundo tercio donde saludaron Rafael Viotti y Fernando Pérez. Sebastián Castella, sustituto de Manzanares, no brindó el toro. A la obediencia del toro le sobró el gesto de derrotar al final de cada embestida. Faltó entrega por las dos partes. La faena no tomó altura. Pinchó antes de cobrar una estocada trasera.

El fino tercero de José Vázquez salió como un rayo de chiqueros. Ese nervio se compensó con la serena lentitud de Roca Rey que lo recibió por verónicas desde el principio. No perdió la movilidad el toro en los dos puyazos perfectos de Quinta. Entre uno y otro un quite explosivo de Roca por chicuelinas rematado con una revolera invertida. La plaza ya fue desde entonces un manicomio. Brindó al rey Juan Carlos. La faena arrancó por estatutarios, la chispa del de Vázquez se acrecentaba con la quietud del peruano. El cambiado por la espalda en el remate hizo rugir a la afición. Por la derecha apuntó falta de recorrido el toro, Roca lo compensó dejándole la muleta en la cara y girando sobre su propio eje. Con la izquierda tuvo mayor profundidad la faena y la embestida. Hubo naturales largos, hondos, ajustados. Todo despacio. Pareció entrar la faena en una meseta cuando Roca inició otra tanda con un cambiado por la espalda con el de Vázquez ya rajado. Esa última tanda de naturales fue el colofón de la faena. Lo mató como lo toreó, muy despacio. Las dos orejas no tuvieron discusión y una ovación despidió la transmisión colaboradora del toro de José Vázquez.

Abrevió Morante con el sosote cuarto que obedeció a medias. Sólo el inicio genuflexo tuvo la estética esperada. Macheteó con solvencia tras probarlo por los dos pitones. Se atascó con los aceros.

El quinto de José Vázquez fue el más ofensivo por su generosa cara. Incierto en los primeros compases de la lidia, cambiante en el tercio final. Sebastián Castella combatió esa informalidad con su firmeza habitual. El inicio fue por estatutarios con mucha emoción. La faena fue una constante demostración de oficio y recursos técnicos para extraer el fondo del de José Vázquez que se había rajado tras el exigente inicio. Hubo derechazos de largo trazo cantados por la afición. Sobró la tanda final ya que se puso incómodo para cuadrarlo. Castella se tiró sobre el burel tras pincharlo primero.

El castaño que hizo sexto fue un punto más alto que sus hermanos. De ofensiva cara. Pareció algo descoordinado en los primeros tercios. Justo de fuerza, quizá lesionado. Lo cuidaron pero no remontó. Roca Rey lo intentó sin éxito por todos los medios y no estuvo acertado con la tizona.

Illescas (Toledo), sábado 9 de marzo de 2019. Feria del Milagro. Toros de José Vázquez, bien presentados y manejables en su conjunto. Morante de la Puebla, oreja y pitos tras aviso; Sebastián Castella, silencio y oreja tras aviso; Roca Rey, dos orejas y silencio. Entrada: Lleno de “No hay billetes”. Saludan tras banderillear al 2º, Rafael Viotti y Fernando Pérez.

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