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Serranito: “Sabía que me podía coger pero había que apostar”

Calmado y con muy buenos ánimos, el diestro Paúl Abadía “Serranito” convalece en Huesca de la cornada de dos trayectorias con pronóstico grave que sufrió este sábado en la Feria de la Albahaca. Las noticias que traslada una vez descuelga el teléfono atendiendo la llamada de Aplausos no pueden ser más positivas: “He pasado bien la noche, sin fiebre que es lo que importa y en las primeras horas de la mañana he sentido más molestias pero con analgésicos y el tratamiento que estoy siguiendo de postoperatorio todo va remitiendo”.

El diestro ha tenido esta mañana la primera cura posterior a la intervención quirúrgica que se desarrolló en la enfermería de la plaza de toros de Huesca al acabar el festejo y según nos traslada “han estado hace escasos minutos los Dres. Crespo y Velilla que son quienes me atendieron en la plaza de toros y también aquí en el Hospital San Jorge de Huesca y la verdad es que la herida presenta muy buen aspecto, el drenaje está realizando su función, uno de ellos ya me lo han quitado y, de momento, deberé estar aquí hospitalizado unos dos o tres días pues el riesgo mayor que puede tener esta cornada es que la zona en la que se ha producido es propensa a contraer infecciones, con lo que seguiré ingresado hasta que este riesgo desaparezca y pueda volver a Zaragoza”.

Serranito resultó cogido este sábado en Huesca en la Feria de la Albahaca por un toro de Adolfo Martín exigente y listo que siempre mostró sus malas intenciones: “El toro siempre tuvo intención de coger… a mí me avisó, al menos, dos o tres veces. Yo sabía que me podía coger pero había que apostar así que seguí haciendo la faena. Después me cazó y en uno de los tres o cuatro derrotes que dio me caló en una cornada que al pasar a la enfermería ya supimos que era grave y honda pero que curamos lo mínimo para poder salir a matar el quinto bajo mi única y exclusiva responsabilidad, ya que los médicos lógicamente se mostraron contrarios a ello”.

Una vez el diestro pasaportó al quinto, Serranito se puso en manos de los médicos y fue en la propia plaza donde fue intervenido conociendo en ese momento el alcance real del percance con dos trayectorias de 10 y 20 cm. con pronóstico grave. El diestro, como apuntaba, permanecerá hospitalizado, al menos, dos o tres días hasta que la evolución de la herida suponga la inexistencia de riesgo alguno por infección, momento en el que recibirá al alta hospitalaria y seguirá con su recuperación en Zaragoza puesto que “por ser una zona delicada y muy dolorosa este percance supone una recuperación paciente para evitar cualquier complicación posterior”.

Serranito concluye nuestra conversación con un ánimo templado y muy seguro de la recuperación inminente del percance al tiempo que se despide agradeciendo profundamente “la atención que me ha dispensado tanto el equipo médico de la plaza de toros de Huesca, el equipo médico del Hospital de San Jorge, donde ahora me encuentro, y la policía municipal, que se han portado conmigo y con mi familia muy bien, además de agradecer también las muestras de afecto y apoyo de la afición. Muchas gracias a todos, de verdad”.