La noticia del día, de la temporada, la que se recordará pasiempre, ha sido la vuelta de Juli a la Maestranza y su Puerta del Príncipe. Cuarta nada menos. Así volvieron -o así debieran volver- los grandes a las plazas de referencia. Así solventaron sus desavenencias. Y así se carga un hombre de razones. Inapelable el desenlace de su reencuentro con Sevilla tras un año ausente. Quede claro desde el principio, inapelable. Fue una película de emociones fuertes. Tremendo el guión que impuso quien asumió responsabilidades de director y actor principal. De principio a fin. Un discurso tenso, emotivo, decidido, encadenado… sin tiempos muertos, sin dudas. Lo que corresponde a un grande del toreo.
Lea el artículo completo en su Revista APLAUSOS
