Bien comenzó la tarde. Juan José Padilla le cortó las os orejas al primero, un animal que se quedaba algo corto y al que le faltó emoción y transmisión. Pero lo que le faltó al toro lo puso el jerezano en una labor apuntalada en la entrega y disposición.
El Fandi, que armó un lío en banderillas, toreó muy templado al natural, el mejor pitón del toro. Asentado el granadino que dejó pasajes importantes. La espada limitó su premio.
Una oreja paseó Manzanares del tercero, un toro de El Torero, en una faena elegante y en la que hubo empaque. Pinchazo y estocada.
Quietud y entrega fueron las claves de la obra de López Simón, en una faena a más sobre ambos pitones. Los circulares acabaron de calentar al tendido. Se le esfumó el premio con la espada.
Mucho pundonor y raza tuvo Padilla frente al quinto un toro encastado que fue premiado con la vuelta al ruedo. Faena a gran altura del jerezano, de mucha exposición. Dos orejas y rabo.
El Fandi, muy poderoso en banderillas, se sintió a gusto frente al sexto, un toro pastueño con el que dejó momentos estimables.
Manzanares le aplicó pulso y mimo al séptimo, un toro justo de fuerzas pero que sirvió para que el alicantino firmara una labor elegante y bella.
López Simón no se quiso quedar atrás y expuso frente al último de la tarde, un toro al que toreó en los medios con mucha enjundia y naturalidad. Dos orejas.
Sanlúcar de Barrameda. Sábado 20 de agosto de 2016. Toros de Garcigrande 1º, 2º, 7º y 8º y El Torero (3º, 4º, 5º y 6º); el quinto premiado con la vuelta al ruedo; bien presentados y de buen juego en general, más encastados los de El Torero; más nobles y justos de raza los de Garcigrande. Juan José Padilla, dos orejas y dos orejas y rabo; El Fandi, oreja en ambos; Manzanares, oreja y dos orejas; López Simón, ovación con saludos y dos orejas. Entrada: Lleno de “No hay billetes”.
