El primero fue un toro de Garcigrande, sin celo y suelto no permitiendo el lucimiento de Morante de la Puebla con el capote. Poca fuerza y casta del toro, aunque noble y obediente. Morante levantó los primeros olés en el inicio por bajo rodilla en tierra. Con la derecha ligó dos series dejándole la muleta en la cara llevando con suavidad la noble embestida del animal. Al natural, de uno en uno, de nuevo sacó muletazos de exquisito sabor, destacando en los de pecho barriendo el lomo. El público, muy con el torero, disfrutó del buen momento del sevillano. Mató de estocada casi entera algo trasera. Oreja.
El cuarto fue devuelto por manifiesta flojedad, aparte de las protestas del público por su trapío. En su lugar salió un toro de Sancho Dávila que tampoco facilitó el toreo a la verónica del sevillano. Se salió a los medios con suavidad, rematando de una buena medida. Empezó por ayudados por alto y un molinete torerísimo. La primera tanda sobre la diestra tuvo sabor, al igual que la segunda al natural. Subió la intensidad en la tercera, formando un alboroto en la siguiente otra vez al natural después de pedir que cesara la música. Arrebatado, entregado y majestuoso en una faena que fue a más poniendo al público en pie. Sencillamente magistral a pies juntos de nuevo con la izquierda. Alboroto en la plaza cuando cerró al toro con muletazos por cada pitón. Faenón que remató de excelente estocada. Locura en los tendidos. Muerte de bravo de un gran toro de Sancho Dávila. Dos orejas y vuelta al ruedo al toro.
El segundo, también de Garcigrande, no dejó lucirse a Emilio de Justo con el capote. Muy suelto, sin entrega, tampoco se empleó en varas, saliéndose suelto varias veces. En banderillas se desmonteró Miguel Ángel Gómez.
Fue poderoso el inicio por bajo, sometiendo la descastada embestida del toro. En los medios realizó una labor en la que el torero quiso mucho y el toro muy poco. Hubo momentos buenos pero aislados, sobre todo por el pitón derecho, pero sin poder redondear una labor lucida. Mató de estocada desprendida.
Emilio de Justo comenzó la faena del quinto con una larga de rodillas y lances sueltos ante un toro de Garcigrande que también salió suelto en los primeros compases. Tuvo que saludar una ovación Morenito de Arles tras dos buenos pares de banderillas. Tras brindar al público rápidamente se fue a los medios para torear muy asentado sobre el pitón derecho, dejándole la muleta en la cara y tirando de la noble, descastada y rajada embestida. De mitad de faena en adelante y, al sentirse podido, el toro buscó tablas de forma descarada. En esos terrenos lo buscó el torero en su afán de triunfo. Tenía el triunfo asegurado pero falló con la espada, cambiando los trofeos por una fuerte ovación tras escuchar un aviso.
El tercero de Garcigrande se dio varias vueltas al ruedo hasta que embistió al capote de Juan Ortega. Embestida incierta y tan sólo una verónica que destacar. Tomó dos varas, la segunda con el picador que hacía puerta.
Fue molesto el toro en la muleta, manso, rajado, buscando tablas y soltando la cara en cada muletazo. Apuntó Ortega pero en muletazos sueltos, sin ser capaz de formar una faena destacada. El público por momentos se impacientó aunque el acople entre toro y torero no se produjo. Mató de estocada algo atravesada y descabello.
El sexto fue otro toro que no se empleó de salida. Juan Ortega desistió muy pronto en el intento con el capote.
El toro, de pocas opciones para el lucimiento, no facilitó la labor de Juan Ortega que tampoco demostró demasiadas ganas. Se puso por ambos lados para justificarse. Mató de estocada.
Jaén, sábado 16 de octubre de 2021. Feria de San Lucas. Toros de Garcigrande (1º, 2º, 4º y 5º), Domingo Hernández (3º y 6º) y Sancho Dávila, como sobrero del cuarto de la tarde que fue devuelto. Correctos de presencia y de escaso juego. El mejor de la tarde fue el cuarto bis de Sancho Dávila. Morante de la Puebla, oreja y dos orejas; Emilio de Justo, ovación con saludos tras petición de oreja y ovación tras aviso; Juan Ortega, palmas y silencio. Entrada: Más de tres cuartos de entrada. La terna al completo saludó una ovación al finalizar el paseíllo con el público puesto en pie. Se desmonteró Miguel Ángel Gómez en el segundo de la tarde. Morenito de Arles saludó una ovación en el quinto.
