Ginés Marín abre la puerta grande en Aguascalientes

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Fotos: EMILIO MÉNDEZ

La penúltima corrida de la Feria de San Marcos de la Monumental de Aguascalientes no contó con el juego que se esperaba por parte del encierro de Villa Carmela, a excepción del octavo, que hubiera merecido el arrastre lento.

Ginés Marín a su primero lo recibió con variados lances de capa y con la muleta cuajó un trasteo a base de firmeza, aguante y exposición con ambas manos, además de hacer el toreo en redondo en un palmo de terreno. Cortó dos orejas, siéndole protestada la segunda de ellas. En el que cerró el festejo, Marín lo aprovechó cabalmente para cuajar una faena variada y torera, además de bien estructurada por los dos pitones, con pasajes de mucho temple, clase y calidad, corriendo la mano de manera estupenda, sobre todo por el lado derecho. Le fue otorgada una oreja y fue paseado en hombros. El toro bien hubiera merecido el arrastre lento.

Álvaro Lorenzo, en su debut en los cosos mexicanos, a su primero le realizó una faena a base de domeñar para luego templar con clase de la buena por el pitón derecho, en tanto que por naturales terminó convenciendo al villacarmeño no obstante su poca fuerza, teniendo mucho mérito todo el esfuerzo del torero. En su segundo, Lorenzo se dejó ver más que esforzado y torero con las dos manos ante la poca colaboración de su antagonista, al que logró sacar importantes derechazos.

Con el que abrió plaza, Gerardo Adame puso todo su esfuerzo en la búsqueda del lucimiento. Se vio empeñoso y toreando con aguante, a pesar del viento y de los peligrosos derrotes del toro. En su segundo, muy áspero, se dejó ver Adame voluntarioso con el capote, sobre todo en un quite por chicuelinas. Le porfió por ambos lados además de algunos derechazos meritorios. Fue aplaudido en ambos.

Armillita IV a su primero, que pegaba arreones, consiguió sacarle algunos pases sueltos por la izquierda. Con su segundo, un ejemplar tardo, su faena de muleta fue a base de voluntad y torerismo.

Aguascalientes (México). Sábado 11 de mayo de 2019. Plaza Monumental. Feria de San Marcos. Ocho toros de Villa Carmela, de los que se esperaba un mejor juego, sobresaliendo el octavo, que bien hubiera merecido el arrastre lento. Regulares fueron los débiles tercero y cuarto. Gerardo Adame, palmas y palmas; Fermín Espinosa “Armillita IV”, palmas y silencio; Álvaro Lorenzo, palmas y palmas; Ginés Marín, dos orejas y oreja. Entrada: Media plaza.

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