Comenzó el serial conmemorativo a la festividad de la Comunidad Valenciana con una novillada sin picadores en la que hubo muy buen ambiente en los tendidos y una importante afluencia de público joven. Acertaron los asistentes, que disfrutaron de una tarde entretenida gracias al excelente juego de los erales de Santiago Domecq y el alto nivel de los actuantes.
Joaquín Caro y Simón Andreu fueron los que cortaron una oreja. Para el valenciano Andreu se le pidió con fuerza la segunda, pero un cicatero presidente le negó una merecida salida a hombros, tras una actuación completa: se fue a la puerta de chiqueros, banderilleó, toreó con relajo y mató superior. Por su parte, el peruano forjado en la Escuela Yiyo de Madrid, Joaquín Caro, se le vio con oficio y toreó con temple, asentamiento y mano baja a un buen novillo.
Aunque solo dio una vuelta al ruedo (mereció una oreja que se pidió tímidamente), dejó muy buena impresión el sevillano Javier Zulueta. Su gusto en todo cuanto hace, buscando siempre la despaciosidad y la pureza, tuvo mucha categoría.
Pedro Monteagudo dejó algunos detalles pero le faltó templanza a su conjunto.
El peruano Pedro Luis, a las puertas de su debut, tiene tanto oficio como ganas por abrirse paso. Mientras que el castellonense Ian Bermejo, el menos placeado de todos y muy tierno, es el que más asumió su papel de becerrista.
Valencia. Sábado, 7 de octubre de 2023. Novillada sin picadores. Novillos de Santiago Domecq, bien presentados y de buen juego en general. Pedro Monteagudo, ovación con saludos; Joaquín Caro, oreja; Javier Zulueta, vuelta al ruedo; Pedro Luis, ovación con saludos; Simón Andreu, oreja con fuerte petición de la segunda y bronca al palco; e Ian Bermejo, palmas tras aviso. Entrada: Un cuarto.