En la conferencia que pronuncié el pasado 2 de febrero en la peña museo del maestro José Luis Galloso, de El Puerto de Santa María, bajo el título “Paco Camino o el toreo” (y que se publicó en este y otros medios) anuncié, aunque ya era algo sabido por casi todo el mundo del toro, que el maestro José María Montilla, decano de los toreros cordobeses, el empresario cordobés Ángel Larrea y yo, hemos propuesto a la Junta de Andalucía que nombre al maestro Paco Camino “Hijo Predilecto de Andalucía” o, al menos, le conceda la Medalla de Andalucía -propuesta que ha tenido innumerables adhesiones-.
Creemos que tiene méritos sobrados para recibir cualquiera de los dos galardones, puesto que ha sido no solo uno de los más grandes, de los más completos toreros, sino el más completo de la historia, afirmación con la que estuvieron de acuerdo prácticamente todos los asistentes al acto. Tomaron la palabra, micrófono en mano, tres matadores de toros, José Luis Galloso, Pepe Osuna y Luis Parra “Jerezano”, para mostrar su adhesión a nuestra petición y confirmar que, efectivamente, ha sido uno de los más importantes toreros de toda la historia.
Concretamente el maestro Jerezano dijo, con emocionadas palabras, que Paco Camino “ha sido el mejor de todos, sin la más mínima duda”, y le sorprendía que aún no tenga el reconocimiento de Andalucía, su tierra. A lo que yo personalmente contesto que estoy de acuerdo con él, pero es que los humanos somos muy imperfectos y con frecuencia cometemos injusticias, si bien lo importante es saber corregir dichas injusticias a tiempo.
Por eso pienso que ahora que en la Junta de Andalucía hay un nuevo gobierno, de distinto color que el que ha habido desde 1978 a 2019, es el momento de subsanar esa deuda que Andalucía tiene con uno de sus más insignes hijos, que a pesar de haber vivido mucho tiempo fuera de Andalucía, porque los avatares de la vida le han llevado por esos derroteros, él se siente muy sevillano y muy andaluz.